Polémico festejo de los futuros egresados del Liceo Mercante

Alumnos del sexto año del Liceo Victor Mercante de la Universidad Nacional de La Plata despertaron a los vecinos con un estruendoso y polémico festejo. Como forman parte de la promoción 107 resolvieron hacer un festejo en la jornada 107 del calendario 2016. La decisión terminó en la sorpresa y enojo de las autoridades.

“Esta actividad está fuera del acuerdo de convivencia y varios estudiantes no estaban en condiciones de ingresar a clase. Llamamos a sus padres para que los vengan a buscar y se hablará en los próximos días para reever las condiciones del acuerdo de convivencia”, dijo la directora del establecimiento educativo, María Constanza Erbetta.

En la comunidad educativa, según se pudo saber, no aceptan que se intente instaurar un nuevo festejo

Entre las autoridades y algunos docentes el enojo fue visible porque los alumnos decidieron por su cuenta realizar un festejo de esta naturaleza, sin aviso previo, y llegar al colegio tras una fiesta que hicieron en un boliche de la zona.

A ciencia cierta, el día 107 del calendario 2016 fue el sábado pasado, pero más de 50 alumnos de los 120 que concurren al sexto año del Liceo, decidieron hacer el festejo que ayer revolucionó a la zona de diagonal 77 entre 4 y 5 y alrededores, con bombas de estruendo, bombos, bengalas de humo amarillo, banderas y bailes.

LA PRIMERA VEZ

Según explicó Erbetta, “ya está institucionalizado el festejo del último primer día, el día del bachiller y la última jornada del ciclo escolar. Esta es la primera vez que hacen un festejo así, de manera inconsulta y sin el aval del colegio, razón por la cual se hablará con los alumnos que participaron de esta actividad”. Ayer, entre los que ingresaron más tarde y los que tuvieron que ser retirados por sus padres recibieron un ausente como primera medida de sanción, y a su vez se acordó abordar este tema en una próxima reunión sobre el código de convivencia que rige en el establecimiento educativo de la UNLP.

Según pudo observarse, mientras los chicos desataron el festejo en el empedrado de diagonal 77, integrantes de la guardia universitaria cerraron los portones del colegio.

Los chicos que ingresaron al colegio dieron clase con normalidad, pero los que participaron del festejo fueron al buffet. Algunos, los que pudieron recuperarse, ingresaron desde las 9 de la mañana y el resto fue retirado por sus padres.

En la comunidad educativa, según se pudo saber, no aceptan que se intente instaurar un nuevo festejo, aunque los alumnos indicaron que la idea es que el próximo año los de la promoción 108 hagan un festejo similar en el día 108 del calendario 2017.

“Ni siquiera estaban cambiados para ingresar al colegio”, apuntaron en el colegio de diagonal 77 entre 4 y 5, sobre los adolescentes que hicieron el festejo desde la noche del domingo y la madrugada del lunes.

EL ULTIMO PRIMER DIA

El último primer día se fue imponiendo con el correr de los años. Ahora no sólo se festeja en la Ciudad sino que se lleva a cabo en diferentes distritos del país. Ese festejo en un primer momento cosechó reparos por parte de docentes y autoridades, pero con el correr del tiempo se lo fue institucionalizando en algunos establecimientos y se transformó en un momento especial para la comunidad educativa de diversos colegios. El Liceo Victor Mercante es uno de los que ha realizado una jornada especial para el último primer día.

Los vecinos también hicieron escuchar su enojo. “A las 7.30 de la mañana no te pueden despertar con bombas de estruendo, gritos. Esto ha sobresaltado a los chicos que estaban descansando para ir a su colegio y a quienes nos estábamos preparando para ir a trabajar”, dijo enojada una mujer que se comunicó con este diario.

El malestar en el barrio llegó a oídos de las autoridades del colegio, quienes resaltaron que “este festejo no está avalado por el establecimiento, fue una decisión unilateral de los alumnos que participaron, que no fueron la mayoría”, dijo Erbetta.

El festejo también provocó algunos inconvenientes en el tránsito, ya que entre las 7.30 y las 8 varios automovilistas toman esa calle para llevar a los chicos a clases o bien para ir a los puestos de trabajo.

El corte de calle generó malestar en algunos conductores que le pidieron a los adolescentes que ingresaran a las aulas a estudiar.