“Con lo único que soñaba antes de ‘Elegidos’ era con que alguien me escuchara”

El platense Jorge Vázquez coronó una etapa de sorpresas y felicidad en su carrera el pasado martes, cuando por su primer disco, “Así”, fue galardonado con el Premio Gardel a Mejor Album de un Nuevo Artista de Tango. Pero la alegría no fue completa: como en una de esos tangos fatales, soberbios y brutos con que su voz ha entregado al público, Vázquez estaba a punto de partir de su casa hacia la ceremonia de premiación cuando le llegó la noticia de una tragedia familiar.

Por eso, el cantor no pudo estar en el Teatro Opera cuando fue nombrado ganador del prestigioso premio con el que, afirma en diálogo con El Día, nunca se atrevió a soñar. “Con lo único que soñaba era con que alguien me escuchara cantar en algún momento”, cuenta de los días previos a “Elegidos”, el concurso de canto de Telefé al que casi no va, y que le cambió la vida.

“No estaba muy de acuerdo con los concursos de canto, pero cuando mi hijo me hizo ver “Elegidos” me gustó: me dijo que me iba a anotar, y yo pensé que quedaba en eso, en la palabra, pero me anotó”, revela su historia el artista que lleva 25 años junto a la música, aunque no con el tango, que no fue su primera pasión.

“Yo no me dedicaba al tango: hace 25 años que canto en La Plata, pero tuve una banda de cumbia y cuarteto, Los Búhos, durante muchos años, y recién en el 2000 pensé que quería cantar otras cosas. Me alquilé un teatro y comencé con las baladas y los tangos, pero mucho más baladas que tangos. Y con el paso del tiempo el tango fue tomando su lugar”, explica Vázquez sobre la música porteña que lo catapultó a la fama en “Elegidos”.

“Participar en ‘Elegidos’ fue un desafío doble: participar, y participar con tango, que no tiene mucha difusión. Competía con gente que cantaba Justin Bieber, y se votaba con una aplicación por teléfono: era difícil que la gente mayor votara por el celular”

Toda una sorpresa para el cantor habituado a las rondas nocturnas platenses, porque ganar un concurso masivo cantando tango era impensado: “Era un desafío doble, participar, y participar con tango, que no tiene mucha difusión. Competía con gente que cantaba Justin Bieber, y se votaba con una aplicación por teléfono: era difícil que la gente mayor votara por el celular. A mi mucha gente me decía que me había votado por la computadora... ¡pero no se votaba por la computadora!”, cuenta el artista que el 17 de junio se presentará en el Teatro Colonial de Avellaneda para presentar sus 25 años con la música, y que tiene programado un viaje a Chile con Los Pimpinela, aunque para verlo en la Ciudad habrá que esperar.

Como ganador de “Elegidos”, Vázquez tuvo la chance de grabar “Así” con Sony, el disco que le valió el Gardel en la categoría tanguera aunque se trata de un disco que también incluye baladas. Pero a pesar de esta posibilidad, el platense se dio cuenta de que “la tele se apagó”: con el fin del programa Vázquez tuvo que volver al modo “luchador” que lo caracteriza y “empujar” el disco: “Cuesta un montón que lo pasen. Cualquier radio pop podría pasar alguna de las baladas, pero ven que el primer track es “Cafetín de Buenos Aires”, y dicen ‘este es un disco de tango’, y no lo escuchan más”, revela.

La tele, de todos modos, se volvió a encender para Vázquez, que cantó “Cafetín de Buenos Aires” para la cortina de “Polémica en el bar” y grabó la que será la cortina de la novela que tendrá lugar dentró de la ficción “Fanny la fan”, “Cuando muerde el amor”. Y ahora, el Gardel, del que, cuenta con la congoja en la voz, se enteró abrazado a su familia tras una jornada de profundo dolor: “Miramos la transmisión por internet con mis hijos, y cuando salió mi nombre empezaron a llorar todos. Para ellos también fue una alegría, después de semejante golpe en la cabeza por lo menos tuvieron una alegría”.

El premio seguramente abrirá más puertas para Vázquez, quien ya planea su segundo disco, donde planea incluir más temas propios. “Jamás pensé que el disco anterior iba a tener un tema mío, y tiene un tema mío. Así que uno va soñando y algunas cosas se van dando, de a poquito”, cuenta. La vida, dicen y sabe un laburante como Vázquez, es tango, y si uno se resbala hay que seguir bailando.