Homenaje al poeta Horacio Castillo
Edición Impresa | 17 de Mayo de 2018 | 04:28

El poeta, ensayista y traductor oriundo de Ensenada Horacio Castillo, fallecido hace ocho años, tendrá mañana a las 19, en el Museo de Arte Contemporáneo Beato Angélico (47 esq. 16 y diag 73), su homenaje, en el que el Prof. Alfredo Maxit comentará su prosa en “Colectánea”, última obra del literato.
“El Arte y los hombres en Colectánea, la última obra de Horacio Castillo. Lectura invitación a otras lecturas” es el título de la charla exposición a cargo de Maxit, quien escribiera en el 2012 “Anotaciones de Horacio Castillo su poesía”.
“Colectánea”, textos sobre una variedad de temas, desplegada a través de medio siglo, fue publicado por exhortación de Enrique Anderson Imbert. “’Usted tiene que escribir todo eso’, me intimó un día. ‘Los tiene que reunir y volver a publicar’, insistió. Traté de invocar algún pretexto, entre ellos mi vinculación con figuras destacadas, que podría interpretarse como narcisismo. Pero fue contundente: ‘Pamplinas’”, recordaba el propio Castillo en la “Introducción” al texto, donde continuaba diciendo que “pongo, pues, al amparo de esa generosa exhortación, la presente Colectánea, que no tiene otra pretensión que compartir momentos de amistad, lecciones de ética, ejemplos de respeto intelectual, reflexiones sobre el mundo de la literatura al que, mal o bien, consagramos nuestra existencia. Una lucha, tal vez infructuosa, contra la dispersión de todo aquello que nos sale al paso de la vida. Pero como dijo Unamuno, ‘cuando uno descubre una aparición que buscaba, ¿acaso no es que la aparición, compadecida de su busca se le viene al encuentro?’”.
Castillo, Ciudadano Ilustre de la Ciudad de La Plata y ganador de un Konex, dedicó su vida al estudio de los griegos y publicó además varios volúmenes de su poesía durante sus 76 años de vida, durante los cuales conoció a algunos de los poetas más emblemáticos del siglo XX: conoció a temprana edad a Ricardo Rojas y en Chile a Pablo Neruda, se relacionó con Vicente Aleixandre y mantuvo correspondencia con el poeta griego y premio Nobel de Literatura Odysseas Elytis, de quien tradujo varios libros al castellano.
Comenzó a publicar sus poemas a principio de los 70. Su primer libro fue Descripción (1971), lo siguieron: “Materia acre” (1974), “Tuerto rey” (1982), “Alaska” (1993), “Los gatos de la Acrópolis” (1998), “Cendra” (2000), “Música de la víctima y otros poemas” (2003) y “Mandala” (2005). Este última cierra su período lírico, que fue reunido en varios volúmenes, entre ellos: “La casa del ahorcado” (1974-1999) y “Por un poco más de luz” (1974-2005). Sus obras serían traducidas al francés, inglés, portugués e italiano.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE