Trump busca acabar con las limitaciones legales para la detención de niños inmigrantes

El gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, anunció hoy que planea poner fin a un acuerdo judicial que rige desde hace años y que limita el tiempo de detención de los niños inmigrantes, una polémica decisión que le permitiría extender la reclusión de familias de indocumentados hasta que la Justicia resuelva sus casos.

El anuncio corona esfuerzos que la administración Trump ha hecho, desde la primera hora, por reemplazar el Acuerdo de Flores, que obliga al gobierno a mantener a los niños indocumentados en el ámbito menos restrictivo posible y a liberarlos "sin demora innecesaria", por lo general no mayor de 20 días.

Funcionarios del Departamento de Seguridad Interior dijeron a medios estadounidenses que el ministerio comenzará a aplicar un nuevo reglamento que refleja el espíritu del acuerdo, vigente desde 1997, y que ya no hay necesidad de intervención de la Justicia, que se suponía que iba a ser sólo temporal.

Sin embargo, en virtud de las nuevas reglas, las familias, incluyendo los niños, serán retenidas en centros residenciales familiares administrados por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas mientras duren los procedimientos de inmigración de los padres, es decir, mucho más que 20 días.

El enésimo intento de Trump para limitar la inmigración, una de sus obsesiones políticas, busca restringir los movimientos por el país de los solicitantes de asilo y desalentar la llegada de otros migrantes, a medida que aumenta el número de familias y menores no acompañados que cruzan la frontera entre Estados Unidos y México.

La medida se publicará el viernes, y entrará en vigor a los 60 días, dijo el secretario interino de Seguridad Interior, Kevin McAleenan, en conferencia de prensa.

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Trump ha dicho varias veces que el Acuerdo de Flores abre una ventana legal que alienta a extranjeros a migrar a Estados Unidos con sus familias.

“Al cerrar esta brecha clave de Flores, la nueva regla restablecerá la integridad de nuestro sistema de inmigración y eliminará el principal factor de atracción que alimenta la crisis”, dijo McAleenan a la prensa, informó CNN.

El funcionario agregó que la normativa mejorará los estándares de gestión de los centros de detención familiares. Las instalaciones serán auditadas de manera regular, y los resultados de las auditorías se harán públicos.

La decisión sobre el Acuerdo de Flores parece encaminada a generar una nueva controversia a la luz de una reciente ola de denuncias documentadas sobre las pésimas condiciones de detención de inmigrantes en centros fronterizos, y está por verse si la Justicia permitirá al gobierno desvincularse de la política que regía hasta ahora.

Se da por descontado que el nuevo reglamento será recurrido ante los tribunales, y además debe ser examinado por el juez federal que gestiona el Acuerdo de Flores. 

"Este es otro ataque cruel contra los niños, que han sido blanco una y otra vez de la administración Trump con sus políticas anti inmigrantes", dijo Madhuri Grewal, abogada de la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (UCLA, por sus siglas en inglés) en un comunicado.

"El gobierno no debería estar encarcelando a niños, y ciertamente no debería estar buscando poner a más chicos en la cárcel por más tiempo", agregó.

El juez federal que vela por el cumplimiento del Acuerdo de Flores ya ha denegado pedidos del gobierno de prolongar el tiempo durante el cual puede detenerse a un niño, y organizaciones defensores de los derechos civiles prometieron bloquear las medidas en la Justicia la primera vez que se habló de ellas, en septiembre pasado.

Unas 475.000 familias han cruzado la frontera sur de Estados Unidos en lo que va del actual año fiscal, casi tres veces más que el anterior récord anual. La mayor parte de esas personas son liberadas mientras los jueces evalúan sus solicitudes de asilo, una práctica que Trump ha criticado.

El gobierno opera tres centros de detención de familias que pueden albergar un total de alrededor de 3000 personas. Uno está siendo usado para adultos solteros, y los otros dos están con su capacidad agotada.

McAleenan dijo que no creía que fuera necesario más espacio para camas, porque, sumando otros esfuerzos para restringir el flujo de migrantes, esperaba que menos gente venga al país.