El papá de Kim Gómez fue a retirar el auto rojo en el que la asesinaron

Marcos Gómez, el papá de Kim, se reencontró en las últimas horas con el auto de la tragedia. Volvió a estar frente a el Fiat Palio de color rojo y relató sus fuertes sensaciones. La imagen parece simple: una mano sostiene una pequeña botella negra con la cara de Mickey Mouse. Al fondo, un Fiat Palio rojo golpeado, testigo mudo de una de las historias más desgarradoras que sacudieron a La Plata.

Ese vehículo no es uno más. Fue el último lugar donde Kim Gómez, la nena de 7 años asesinada en febrero, estuvo con vida. Ayer, por primera vez desde aquel día, su papá, Marcos, volvió a abrir sus puertas. Lo hizo para retirarlo del depósito y se quebró. Poco después, volcó su dolor en un mensaje en redes sociales que conmocionó a todos. “Hoy me animé a sacar ese auto que tanto esfuerzo me costó y que ahora ya no significa nada. Ese auto rojo que supuestamente iba a darles comodidad y seguridad para no andar caminando o en colectivo para ir al colegio”, escribió en Instagram, junto a la foto que lo dice todo.

De acuerdo con la investigación, Kim intentó abrir la puerta para escapar, pero no se lo permitieron. “A veces me pierdo pensando por qué no te dejaron bajar. Quisiera saber qué pasó en ese asiento. Estoy seguro de que peleaste, porque vos sí eras valiente”, expresó su padre en el posteo. El recorrido terminó en las calles 82 y 28. En algún punto del trayecto, Kim cayó al asfalto y el mismo auto la atropelló. El impacto fue fatal: el cuerpo quedó atrapado debajo y fue arrastrado varios metros. Murió en el acto.

“Todavía tiene tu agua, tus stickers… y ahora mis lágrimas. Te pido tu luz para seguir. Quiero ser tan valiente como vos. Nunca me dejes, porque yo no lo voy a hacer. Te amo, Kim”, cerró en su publicación. En tanto, tal como informó este diario, la causa por el asesinato de Kim camina rumbo al juicio oral.