Bahía Blanca: la galería Visión 2000 resurge tras cuatro meses del temporal

A cuatro meses de la inundación que el 7 de marzo dejó severos daños en Bahía Blanca, la galería comercial Visión 2000, ubicada en Belgrano al 100, muestra señales de recuperación. Allí, más del 80% de los locales volvió a abrir, gracias al esfuerzo de comerciantes y al acompañamiento del Municipio, según relató Verónica, dueña de una santería, en diálogo con LU2 Radio Bahía Blanca.

“La galería está volviendo a encaminarse. Gracias a Dios, el 70% o un poco más somos inquilinos, así que tratamos de volver a empezar, porque esa es la palabra”, expresó Verónica, una de las tantas comerciantes afectadas por el temporal. La situación fue crítica: estuvieron más de veinte días sin luz ni agua, con barro acumulado y pérdidas totales. “El cuadro era cerrarla. Ese fin de semana fue muy duro, mucho llanto, mucha bronca”, recordó.

Verónica tiene su local en una de las denominadas “peceras” que dan a la calle Belgrano, una de las áreas más dañadas. “Perdimos todo. El agua entró con tanta fuerza desde la cochera que se rebalsó para arriba. Superó el metro ochenta. Lo único que rescaté fueron cuatro o cinco imágenes de resina que pude lavar”, explicó.

En medio de la emergencia, comerciantes y propietarios se organizaron a través de un grupo de WhatsApp. “Nos volvimos a unir para que la galería siguiera adelante”, comentó. También destacó el respaldo del Municipio: “A los días vinieron funcionarios. Nos escucharon y más tarde nos citaron para hacer un relevamiento. Recibimos un subsidio que, si bien no fue mucho, nos ayudó un montón para pagar deudas”.

Además, resaltó la actitud solidaria de varios dueños de locales. “Hubo empatía. Muchos se acercaron. En mi caso, el mío vino el sábado siguiente y se portó muy bien”, aseguró.

Actualmente, funcionan más de 50 locales, aunque algunos debieron trasladarse a pisos superiores. Aún quedan cinco o seis sin poder repararse completamente. Muchos comerciantes tuvieron que recurrir a préstamos para continuar. “Solo tuvimos el subsidio de la Municipalidad. Los préstamos blandos son préstamos, y muchos tuvimos que sacarlos para reacomodar los locales”, señaló.

A pesar de las dificultades, Verónica transmitió esperanza: “Todos le estamos poniendo muchas ganas. Queremos que la gente vuelva a ver la galería como un lindo paseo. Fue durísimo, pero no bajamos los brazos”.