Roban $9 mil a mujer en una salidera bancaria

Un nuevo robo bajo la modalidad de salidera bancaria tuvo lugar, ayer al mediodía, cuando la víctima salía de una entidad de La Loma y se disponía a ingresar a otra para pagar impuestos. En el medio, un ladrón la interceptó mientras otro lo esperaba en una moto, y le sustrajo una importante suma de dinero sin exhibir ningún tipo de arma, para luego darse a la fuga, señalaron fuentes policiales consultadas por este diario.

El hecho, destacaron las fuentes, ocurrió cerca de las 13.30 cuando una joven de 29 años, domiciliada en Villa Elvira, fue abordada por dos delincuentes que la venían siguiendo desde un banco del que acababa de salir, en 44 entre 26 y 27.

De acuerdo a las constancias de la causa, la mujer ingresó cerca de las 12.40 a la sucursal del Banco Santander Río, ubicada en 44, 26 y 27. Allí cobró un cheque por una suma de 9 mil pesos y media hora más tarde dejó la entidad.

LA SIGUIERON

Los investigadores creen que a esa altura, la víctima ya estaba siendo vigilada por quienes más tarde se convertirían en sus atacantes o al menos por alguien en complicidad con éstos.

Una vez que la mujer dejó el banco, afirmaron los pesquisas, se subió a su auto, un Fiat Duna, que unos minutos más tarde estacionó sobre la calle 28 entre 43 y 44.

Al parecer, la joven tenía pensado ir a pagar una serie de impuestos al banco Provincia de 44 entre 27 y 28. Pero jamás llegó.

Ni bien bajó del vehículo, que acababa de estacionar sobre calle 28, los delincuentes frenaron sobre la calle y uno de ellos bajó.

Más tarde y sin que la víctima advirtiera hasta allí la maniobra, el delincuente que iba en la moto como acompañante se acercó y le dijo "dame la plata porque te pego un tiro", aunque en ningún momento exhibió un arma de fuego.

LE SACAN LA PLATA

Los voceros del caso indicaron que la víctima, con domicilio en Villa Elvira, jamás resistió el ataque.

Mientras que el atacante, demostrando que conocía los movimientos de la joven, le sacó los 9 mil pesos que se encontraban guardados en una agenda.

Con el botín en su poder y la damnificada en medio de una crisis de nervios, el delincuente se subió a la moto que lo aguardaba sobre la calle, y así ambos escaparon a toda velocidad con rumbo desconocido.

Más tarde, la mujer se acercó a la comisaría 4a., con jurisdicción en la zona, para radicar la denuncia, aunque a raíz de los nervios resultaron escasos los datos acerca de los asaltantes -aún no hay detenidos-, aportados por la víctima.