La Unión Polaca en Berisso, en medio de "un profundo dolor"

Estaba leyendo el periódico, cuando el llamado de un miembro de la colectividad interrumpió su desayuno, el viernes último. Había muerto en un accidente de avión el presidente polaco, Lech Kaczynski, junto a los principales dirigentes de ese país, y a Gustavo Zimny, presidente de Unión Polaca en Berisso, el hecho lo conmovió.

"Me impactó la cantidad de personas que fallecieron", asegura Zymny. En total: murieron 97 pasajeros. Y no hubo sobrevivientes.

El teléfono ya no dejó de sonar. "Nos llamaron los socios de todas las colectividades de Berisso para darnos las condolencias. Cuando ocurre una desgracia hay mucha solidaridad entre los socios", afirma Zimny.

A raíz de la tragedia, la colectividad polaca de Berisso ("Una pequeña Polonia en Berisso", según la definen sus integrantes) dictó el cese de todas las actividades culturales que allí se realizan, como así también decretó una semana de duelo.

"Por respeto, no habrá música, y no funcionarán ni la escuela de idiomas ni el ballet", sostiene Zimny. Es que allí ensayan 18 parejas de baile. Zimny calcula que, entre polacos y descendientes, habría en nuestra región alrededor de 4 mil polacos.

DUELO

"Cuando murió el Papa Juan Pablo II, se dictó un mes de duelo", recuerda Zimny, que se niega, no obstante ello, a comparar los dos hechos. "Fue muy distinto, para la muerte del Papa estábamos preparados, esto, en cambio, nos tomó por sorpresa", expresa Lilia Romero de Zimny, protesorera de la sociedad.

A Kristina Klinkowcs, vicepresidenta de la sociedad, una polaca radicada desde hace 20 años en Berisso, la noticia la sorprendió igual que a sus compañeros, pero con la particularidad de que ella tiene familiares en Polonia.

"Ni bien me enteré, sintonicé una radio polaca por internet. Llamé a mis familiares, pero no me quisieron atender, porque estaban pendientes de las noticias. Me dijeron que llamara más tarde. están todos muy dolidos y conmovidos, muy pendientes de las noticias", relata Klinkowcs.

Y expresa: "Me dieron ganas de estar allá [en Polonia]. Por eso puse la radio de allá, porque siento más cerca el corazón cuando escucho el idioma polaco".

La sociedad de Berisso es la colectividad polaca más antigua de la Argentina. El 20 de abril cumplirá 97 años. Ese mismo día, se celebrará una misa en la Iglesia María Auxiliadora de esa localidad, a las 19, en memoria de los 97 tripulantes polacos fallecidos a bordo del Tupolev Tu-154.

CONDOLENCIAS

La colectividad envió mensajes de condolencias tanto a la Embajada de Polonia en la Argentina, como así también al gobierno polaco. Y hasta firmaron un libro de condolencias. "Es una costumbre polaca", afirma Klinkwocz.

"El avión había sido reparado en Rusia", desliza Zimny, aunque prefiere esquivar la cuestión de si este episodio podría complicar las relaciones bilaterales entre ambos países.

"Esto puede dañar la incipiente relación de amor entre Rusia y Polonia", admite Klinkowcs, en un dificultoso castellano.

UN PUEBLO UNIDO

"El pueblo polaco es muy unido, seguramente por haber sufrido mucho durante la guerra", explica Zimny.

Y Klinkowcs completa: "El polaco es muy católico. En Polonia hay dos iglesias en una misma cuadra. El domingo a las 10 es como un feriado. La gente se pone sus mejores atuendos para ir a misa".

Según Zimny, "la reacción del pueblo polaco ante las tragedias es muy distinta" a la de otros pueblos. "Yo recuerdo cuando murió Perón, que fue un suceso, pero la sociedad estaba muy dividida. Los polacos, al margen de sus diferencias políticas, están muy unidos", señala Zimny.

"Cuando viajamos a Polonia tuvimos la oportunidad de visitar un castillo que había sido reconstruido tras los bombardeos. La gente había conservado las partes, y gracias a esa acción, se pudo conservar. ¡No se robaron ni una pieza!", exclama Zimny.

En este momento, una joven de la colectividad de Berisso se encuentra en Polonia. "Es como si estuviésemos todos allá", expresa Klinkowcs.