Electrodomésticos: suba de precios e inquietud por comprar

SIN PRECIO. ASÍ LUCIERON LOS ESCAPARATES DE LAS CASAS DE ELECTRODOMÉSTICOS EN LA CIUDAD

La primera imagen que se recibía ayer al entrar a un comercio de venta de electrodomésticos era la ausencia de los tradicionales “cartelitos” con que se informa y se promociona los precios y las formas de pago de los productos en exhibición.

Esa ausencia era un vacío notable que en algunos locales contrastaba con una cantidad de clientes mayor a la habitual.

Ese era el panorama que desde el jueves podía apreciarse en las principales casas de venta de televisores, computadoras, heladeras y otros electrodomésticos donde, según consultas hechas por este diario, en cuestión de horas se produjo una remarcación de precios que varió entre el 5 % y el 30%, aunque con un promedio general de entre el 18% y el 20%.

Durante una recorrida realizada ayer por varios comercios locales pudo verse que sólo algunos productos mantenían los precios pegados en los escaparates.

Era el caso de los aire acondicionado, las heladeras, algunas marcas de cocinas y los hornos eléctricos y de microondas.

El mayor impacto en las remarcaciones, según comentaron algunos clientes y empleados consultados, pareció afectar a los televisores.

En ese rubro los ajustes alcanzaban hasta los $3.000 por unidad, dependiendo de las marcas y modelos que se ofrecen en el mercado.

Sobre los televisores, particularmente, las charlas entre clientes y vendedores giraron en torno a la especulación sobre futuros aumentos y, sobre todo, la influencia que podría tener en los precios el próximo mundial de fútbol a disputarse en junio próximo en Brasil.

Mientras algunos vaticinaban que lejos de bajar los precios aumentarían otros alentaban la esperanza de que futuras promociones, como suele ocurrir cada cuatro años en vísperas de cada disputa de la disputa de una nueva edición de la Copa del Mundo, pudieran acomodar los precios.

En ese sentido en algunos comercios se mencionó una merma en los stocks de mercaderías.

Esto último aumentó la incertidumbre en los consumidores que salieron ayer a ver qué pasaba con los precios.

Habitualmente los vendedores consultan en las computadoras del local si el producto requerido por cliente está en existencia.

Ayer se dieron muchos casos en que los vendedores informaron que “recién vendí el último”, ante la decepción del cliente decidido a comprar.

Es que muchos consumidores se lanzaron ayer a las casas de electrodomésticos.

MAS CLIENTELA

Algunos, por lo que pudo observarse, lo hicieron para asegurarse la compra que tenían planeada en tanto otros quisieron saber si los cambios en el dólar habían afectado el precio del producto que tenían en mente comprar más adelante.

El panorama en los salones de venta era, en ese sentido, dispar. Mientras en algunos comercios se admitía un aumento de alrededor del 20% de la clientela habitual, en otros los locales estaban prácticamente vacíos mientras que en la zona del microcentro se notaba una intensa actividad en esos negocios.

La imagen de transeúntes llevando grandes cajas con electrodomésticos se repitió a lo largo de la mañana y la tarde en el microcentro y en otras zonas comerciales de la Ciudad.

Pero mientras desaparecían los carteles con los precios y se admitían las subas, las modalidades de venta con tarjetas de crédito se mantenían ayer en la mayoría de los comercios consultados.

Las ventas con tarjetas de crédito seguían realizándose en hasta 12 cuotas sin interés o en hasta 18 cuotas con recargos, según lo informado a este diario en las principales casas de electrodomésticos de la Ciudad.

Esto último, se señaló, alentó a muchos a cerrar operaciones en cuotas lo que, se indicó constituyó el mayor volumen de las ventas por encima de las de efectivo.