Se impuso por coraje y actitud

EL BOCHI LICHT LA PASA ANTE EL CRUCE DE REINA. OBSERVA MUSSIS. EL LOBO JUGO CON DETERMINACION Y GANO BIEN

ANALISIS
Por NICOLAS NARDINI

Coraje . Para buscar los tres puntos y no quedarse sólo en la tentadora idea de descansar en un empate que tampoco era un mal resultado.

Actitud . Para sostener la ventaja mediante un gran esfuerzo colectivo, que implicó un desgaste descomunal de la línea de volantes para copar la zona media y dejar abierta la puerta para sorprender en velocidad.

Inteligencia táctica . Para conservar la diferencia y esperar los momentos oportunos para dar la estocada final de contragolpe, ante un adversario cansado que dio algunas ventajas numéricas en su fondo cuando, jugado por completo, fue por el “todo o nada”. Y fue nada porque se encontró con un rival que estaba esperando esas desarticulaciones para rematar definitivamente la faena.

DE LAS PARTES AL TODO Y DEL TODO A LAS PARTES

A este Gimnasia trabajador, es mejor entenderlo desde lo colectivo que desde lo individual. Sin embargo, resulta insoslayable, luego de una producción como la de anoche, destacar algunos elementos puntuales que le dieron brillo a la conquista.

A la cabeza está Franco Mussis , que desde su convicción inquebrantable le dio aire al equipo para soñar con que volver a ganar en ese escenario no era una quimera. En la misma cancha que le regaló su primer alarido con la albiazul, mordió en la mitad del campo y centró de manera notable para asistir a Alvaro Fernández en la previa del gol del charrúa. Y le puso el moño a su labor individual con un pelotazo de 50 metros que dejó al colombiano Peralta cara a cara con Champagne. Del resto se encargó Meza para poner el 2 a 0 en el placar y darle visos de seguridad a un triunfo que los triperos valorarán muchísimo al final del curso.

El “pibito” Mendoza está haciendo fuerza para abandonar ese mote y consolidarse como una realidad en la primera de Gimnasia. Apareció por el hueco dejado tras el infortunio de Matías García y, desde aquel momento, no hace más que acumular méritos para quedarse con una plaza fija entre los preferidos de Troglio.

Y el uruguayo Alvaro Fernández le da a este Lobo lo que ningún otro, hasta el momento, le brindaba: pausa, criterio y concepto de juego en la zona medular. No es el más hábil, tampoco el más veloz, pero tiene la virtud de dar, casi siempre, el pase lógico que el hincha espera desde la tribuna. Y eso no es poco en un fútbol donde la claridad, muchas veces, brilla por su ausencia. Gimnasia ganó en Bahía con autoridad, se acerca a su objetivo central y, de paso, se permite acuñar una ilusión para ir por algo más.