La dirigencia del Millo siempre trató de “marcarle la cancha”

RAMON ANGEL DIAZ

El tercer ciclo de Ramón Díaz como entrenador de River Plate fue nuevamente exitoso por el retorno a la gloria del club, ganando dos títulos en una semana, aunque contó con un final inesperado y una abrupta renuncia, en el momento de mayor paz en la institución después de seis años. A pesar del regreso a las primeras planas, Ramón en estos últimos seis meses tuvo un camino sinuoso y debió adecuarse al perfil de la nueva dirigencia del club, que siempre trató de “marcarle la cancha” en cuanto a sus actitudes y declaraciones.

Después del final del período de Matías Almeyda, en medio de un clima enrarecido con los hinchas, tras haber logrado el ascenso a Primera, el entonces Daniel Passarella decidió ir a buscar a Ramón, el técnico pedido por los fanáticos riverplatenses, para salir de la situación de constante angustia. El debut del tercer ciclo fue con triunfo en San Juan, por 2 a 0 sobre San Martín, en la última fecha de aquél lejano Torneo Inicial 2012, que ganaría Vélez Sarsfield.

Ese posterior verano fue triunfal para Ramón, ya que terminó 2-1 arriba ante Boca Juniors en los Superclásicos estivales, dejando en claro que pretendía volver a soñar con lograr un título con su amado River. El Torneo Final 2013, que ganaría Newell’s, River sorprendió y peleó el campeonato, después de un arranque a todo vapor con varios triunfos consecutivos, pero luego no pudo mantener el nivel y finalizó segundo en la tabla, a tres unidades del campeón. Después, vendría el Inicial 2013, y se produciría la controvertida salida de David Trezeguet a Newell’s, un tema que siempre quedó pendiente para explicar los motivos. La campaña en ese campeonato iba a ser muy distinta a la anterior, ya que River terminaría entre los últimos lugares y con rendimientos muy bajos, además de perder el Superclásico en el Monumental por 1 a 0. Nuevamente, crecieron allí los cuestionamiento a Ramón y a su ayudante de campo, su hijo Emiliano Díaz. Diciembre de 2013 fue un mes clave para River, ya que asumió D’Onofrio como presidente, luego de que Passarella le extendiera el contrato al entrenador, en una suma millonaria. El nuevo titular del club mantuvo el puesto del riojano, pero ambos renegociaron el vínculo y se bajaron las pretensiones.

La polémica estuvo presente durante este tercer ciclo de Ramón y su punto más álgido se dio tras el triunfo 2-0 contra Atlético de Rafaela, en el Monumental, cuando le dedicó la victoria a “Los Borrachos del Tablón”, la barrabrava del club. Allí hubo otro tirón de orejas de la dirigencia, que le exigió al técnico que rápidamente aclare sus dichos porque en el medio estaba River institución. Ramón intentó como pudo salir del brete en que se había metido, dio vuelta la página y ganó el campeonato y la Súper Final.