Una vida para poner en escena

Músicos y actores platenses recrearon en el teatro Coliseo Podestá la vida y obra de Sor María Ludovica a través de un colorido musical que se puso en escena a total beneficio de la Cooperadora del Hospital de Niños. De esa manera, Filocalia, un grupo de artistas católicos, se inspiró en la figura de la beata para darle forma a la obra “Para los niños lo mejor” y, a través de un bono contribución de $50, el público accedió al espectáculo y colaboró con la Fundación del hospital.

Con un teatro Coliseo Podestá colmado, Filocalia, responsable de la producción y la realización, estrenó el musical que conjuga canto y actuación para recrear las primeras décadas del Hospital de Niños de La Plata.

La trama es rica en anécdotas e historias de médicos, monjas, enfermeras, voluntarios y platenses que pasaron por la institución. Además se destacó la tarea de toda una generación solidaria que, a pesar de distintas dificultades, se propuso levantar una obra en beneficio de los niños.

DOS AÑOS DE ESFUERZO

Francisco Flores, responsable del guión, letra y música, contó que la obra se gestó por sugerencia de la religiosa Adriana Moreno. “Nosotros siempre vamos al Hospital de Niños a cantar o a colaborar y un día se acercó la hermana y me pidió que hiciéramos algo sobre Sor María Ludovica; a partir de ese momento leí muchas biografías y hablé con personas que llegaron a conocerla para extraer distintas historias”, señaló Flores quien trabajó en la obra durante dos años.

En ese contexto, se festejó la aparición de la humilde monja italiana - encarnada por Rosario Sancho - que comenzó a trabajar en la cocina del Hospital y luego se convirtió en la inspiradora y el símbolo de esa institución. Ese fue el eje del musical que llevó a escena a unas 30 personas y que se estudia reiterar en los próximos meses.

Filocalia, que en griego significa “amor por la belleza”, es una agrupación católica platense que nació en 1994 y desde ese momento realizó decenas de recitales y obras musicales religiosas en teatros, campos deportivos, plazas, festivales callejeros, cárceles, villas y misas.

En sus trabajos el grupo que se califica como misionero, se vale del folklore latinoamericano, del tango, del pop y del rock para dar su mensaje en defensa de la vida y la familia.

Impulsados por ese espíritu, los artistas recorrieron distintas provincias de Argentina, Uruguay y participaron de las Jornadas Mundiales de la Juventud de Madrid - 2011 - y de Río de Janeiro - 2013 -.

Las representaciones y la música se inspiran siempre en la vida de Jesús o en el testimonio de distintos miembros de la Iglesia como fue el caso de Sor María Ludovica.

Entre sus obras más destacadas están: Pesebre musical “Misterio de la Navidad”; Vía Crucis musical “El amor que salva al mundo”; “Discípulos y Testigos de Cristo” y ahora se suma el musical basado en la vida y obra de Sor María Ludovica.

VIDA Y OBRA DE SOR MARIA

Sor María Ludovica de Angelis nació en San Gregorio, un pueblo los Abruzzos, Italia, en 1880. Su nombre real era Antonina de Angelis e ingresó a las Hijas de La Misericordia el 14 de noviembre de 1904, en ese mismo día fue enviada a la Argentina. A poco de llegar al país, comenzó su vida misionera en el Hospital de Niños en el que llegó a ser directora hasta su deceso. La Parroquia Sagrado Corazón de Jesús en City Bell fue otra de sus obras y además fundó un hogar para niños en situación irregular en la ciudad de Mar del Plata.

En 1935, sufrió los primeros síntomas del cáncer renal que le causó la muerte. Sin embargo, continuó en su ininterrumpido trabajo de ayuda social y en la atención de los enfermos. Murió en esta ciudad, en 1962 a la edad de 82 años y sus restos permanecen en la Catedral.

Su proceso de beatificación comenzó en 1996, fue declarada Venerable en 2001 y beatificada en Roma en el año 2004 por el Papa Pablo II tras comprobarse su primer milagro (ver recuadro).

CAMINOS DE SANTIDAD

La Secretaría de Turismo bonaerense presentó la semana pasada el circuito “Caminos de santidad de la provincia de Buenos Aires”, luego de una misa presidida en la Catedral por el arzobispo de La Plata, monseñor Héctor Aguer, en la memoria litúrgica de la beata María Ludovica de Ángelis.

El circuito reconstruye el paso por la provincia de los beatos y personas que con su ejemplo y virtudes cambiaron el ambiente en el que vivieron y actuaron. En ese contexto, se recordó el trabajo caritativo de sor Ludovica en el Hospital de Niños.

Monseñor Aguer describió a sor Ludovica como “la joya de la ciudad de La Plata” y exhortó a los fieles a rezarle para que, mediante su intercesión, se produzca el milagro que falta para su canonización.

Luego de la misa, se bendijeron los carteles de “Caminos de Santidad” y se relataron anécdotas de la beata Ludovica, venerada en la Argentina e Italia.