“Soy un perejil”, dijo uno de los acusados de la masacre policial

EZEQUIEL FILIPPI MEDINA, UNO DE LOS ACUSADOS

Hoy se conocerá la sentencia del juicio que se le sigue a dos hombres acusados por su presunta participación en la masacre de los policías, ocurrida el 19 de octubre de 2007 en la Planta Transmisora del Ministerio de Seguridad bonaerense. Y uno de ellos, Ezequiel Filippi Medina, escribió una carta, donde reiteró su inocencia, tal como lo hizo las dos veces que se dirigió al tribunal.

“Voy a contar mi verdad. Llevo dos años y diez meses detenido, preso y a gritos exclamo que soy inocente, o mejor dicho, soy un perejil, como me tildaron los que allanaron mi casa y me detuvieron para que ocupe un lugar que le corresponde a otro”, agregó en la misiva, que es muy crítica de la labor fiscal ante una supuesta “animosidad” a la hora de plantear los elementos probatorios en su contra.

“No provengo de una cultura delictiva, si es cierto que he consumido estupefacientes. En mi declaración no me quebré ni me contradije, porque lo que dije es toda mi verdad y nadie pudo demostrar lo contrario, han dicho que fue una declaración carente de sentimientos, pero la verdad que la emotividad la preservo para mi privacidad, amén que tengo que ser fuerte por la familia hermosa que tengo, que demasiadas cosas ha tenido que pasar por todo esto tan injusto”, destacó.

“Busco justicia y les pido a los jueces que no se dejen afectar a la hora de resolver. Con el debido respeto que me merecen los fallecidos y sus familiares, soy una víctima de la planta transmisora, porque estoy detenido y soy inocente”, concluyó.

En tanto, Liliana, la madre, aclaró que, en caso de un fallo condenatorio, “no vamos a quedarnos con los brazos cruzados”.