“Cocinarles, lo que más disfruto”

CÉSAR CARRASCO (41): “APROVECHO QUE TENGO HORARIOS FLEXIBLES PARA PARTICIPAR MÁS DE LA CRIANZA DE LOS CHICOS”

“Cuando era chico mi mamá me enseñaba a cocinar, a lavar, a limpiar la casa. Me decía que lo hacía ‘por si me enamoraba de una mujer que no supiera hacer las cosas del hogar’. Me tocó enamorarme de una que sabe hacer todo y que lo hace bien. Pero desde que empecé a imaginarme padre, mi proyecto incluía compartir todas las tareas domésticas”, dice César Carrasco (41), papá de Jeremías (6 años) y Mikelina (6 meses), quien dice disfrutar cada cosa que hace para colaborar en la crianza de los chicos.

“Lo que más disfruto es cocinar para ellos. Pero también me gusta llevarlos a la escuela, cambiarlos y, sobre todo, compartir la hora de jugar”, cuenta César, aunque reconoce que cuando era chico las cosas en su casa eran bien distintas.

“Los padres de antes eran diferentes. Venían de trabajar y los chicos no tenían que molestarlos, mientras las mujeres los tenían que atender. Esas cosas cambiaron mucho. Entre la mayoría de mis conocidos no son más así; las tareas se comparten. Pero también es cierto que uno tiende a acercarse a gente que coincide son su forma de ver estas cuestiones”, dice.

Después cuenta que en su casa tanto él como su esposa, Marisa Malchiodi, trabajan. Pero mientras Marisa tiene horarios más estrictos, los de él son más flexibles, lo que le permite disponer de más tiempo para compartir el día a día de los chicos.

“Mientras ella no está yo me encargo de llevar al nene a la escuela y me ocupo de la nena. A la noche, cuando ya estamos todos en casa a veces los dos tenemos ganas de cocinar, entonces uno hace la comida y otro el postre. Los chicos ven esto y también quieren participar, así que al nene, que ya es más grande, lo dejamos que se ocupe de algunas tareas en la cocina que no impliquen manejo del fuego”, relata César quien reconoce que una de las que más celebra su forma de vivir la paternidad es su suegra: “siempre me tira flores”.