Relaciones 2.0: la pareja se encuentra por celular

Antes de que aparecieran las ‘dating apps’ o aplicaciones de citas para conocer a otra persona, había que tener un poco de suerte dentro del grupo de amigos o algo de “parla” a la hora del levante. Pero las nuevas tecnologías se multiplicaron como panes y, de la mano de las aplicaciones de contacto o “GPS del amor”, todo eso parece haber quedado en el pasado. Encontrar la pareja perfecta nunca ha sido una tarea fácil, pero con la llegada de estas plataformas en línea que ayudan a dar con personas afines o con los mismos propósitos a través de internet, las posibilidades de hallar a nuestra “media naranja” ideal o simplemente vivir una experiencia positiva pero pasajera parecen estar en aumento.

El primer paso consiste en registrarse en uno de estos servicios, el siguiente radica en crear un perfil de usuario, el tercero es buscar gente afín entre los registrados de esa misma plataforma y, a partir de allí, todo -o al menos casi todo- puede suceder, desde conocer a quien puede ofrecer un amor de verano hasta aquella persona que se nos presente como un amor para toda la vida.

“Las ‘dating apps’ facilitan y permiten acelerar y multiplicar los encuentros virtuales o reales con otras personas”, apunta la psicóloga Verónica Rodríguez, especializada en relaciones de pareja y para quien “si bien es una herramienta ventajosa y que debe ser aprovechada, lo peor que uno puede hacer es depositar toda la confianza en una aplicación. La app es una herramienta, pero el motor que le da impulso siempre es uno y su subjetividad”.

La app Shakn, una de las más populares actualmente en Europa, viene reclutando cada vez más usuarios interesados en conocer gente nueva, especial y que aporte un punto de emoción a sus vidas. Como en otras plataformas, la idea primaria radica en unir a personas registradas a través de los contenidos que comparten: los perfiles con sus experiencias más vitales, los momentos especiales (fotos, reflexiones, audios, música) que viven y los planes ideales que proponen para empezar a citarse en el instante, si así lo desean.

CLAVES DE UN PERFIL ATRACTIVO.

“Para tener éxito y más opciones de hacer contactos mediante una aplicación de dating, el usuario tiene que subir una buena foto de perfil en la que se le pueda ver bien y completar cuantos más datos sea posible”, señala José Minguez, fundador de Shakn. Pero según Minguez no basta con poner una foto y unos cuantos datos fríos como la edad, la ocupación y la altura, ya que el usuario quiere conocer algo más de la persona que hay detrás de un perfil antes de establecer un primer contacto.

Por eso los usuarios de estas plataformas cuentan con distintas funciones para expresarse en cualquier instante a través de una canción, una foto, un libro, un texto, un video o incluso una nota de voz.

“Esto permite a los usuarios compartir los momentos de su día a día en su perfil y ser visibles para los demás, que así pueden conocerlo todo de una persona -desde su aspecto físico hasta sus gustos y aficiones-, intuir su estilo de vida, saber de antemano si podría encajar con ella, y decidirse a hablarle”, destaca Minguez.

Si bien no se conocen cifras sobre la cantidad de usuarios de Tinder en Argentina, se estima que cada mes se producen más de 2.5 millones de encuentros, un 20 por ciento más que el promedio de América Latina

En nuestro país, la número uno del segmento es Tinder. Para usar la aplicación, se descarga y se sincroniza con la cuenta de Facebook. Se pueden ver perfiles de hombres y mujeres que están cerca nuestro, porque funciona por geolocalización (algo similar pero distinto ocurre con Happn, una aplicación que desembarcó el año pasado en nuestro país y que sirve para encontrar personas que pasan por el mismo lugar que nosotros). Al deslizar el dedo sobre la pantalla se indica si gusta o no la persona que se está viendo. Si dos candidatos coinciden, se abre el chat y ahí se puede coordinar un encuentro.

Tinder fue lanzada en 2012 y está presente en 196 países. A través de esta aplicación para conocer personas de manera online, se producen 26 millones de coincidencias (matches) cada día, y hasta hoy suman más de 11.000 millones. “Creemos que es la máxima herramienta para planificar tu próxima aventura”, destaca Sean Rad, CEO y co-fundador de Tinder.

Las nuevas aplicaciones para conseguir pareja circunscriben la búsqueda al mundo virtual, pero lo cierto es que actúan como un GPS que permite localizar a nuestra “media naranja” o “canita al aire” en la misma área geográfica por donde uno pasa.

En tiempos del amor 2.0, entonces, salir de levante parece imposible sin el celular en la mano. La pregunta “¿dónde estás?” funciona como filtro en nuestro smartphone para dar con aquella persona que sintonizó con nosotros en nuestro celular.

Quienes analizan estas aplicaciones sugieren que, para sacarle el máximo partido a las plataformas y ofrecer la mejor versión de nosotros, una opción clásica pero recomendable es subir siempre una buena foto. “Es importante que en nuestro perfil se vea perfectamente la cara, aconsejable elegir como telón de fondo un lugar que tenga algún significado para nosotros y esta imagen tiene que ser actual, realista y sin demasiados retoques fotográficos ni complementos, como anteojos de sol o sombreros y gorras”, sugieren.

También es fundamental sacar lo mejor de uno mismo en las conversaciones, mostrándose divertido, ingenioso e interesado en la otra persona, ya que de ahí derivará la posibilidad de conseguir una primera cita.