Encontrando a los héroes

Para Besson, lo mejor de la cinta no son los cientos de mundos explorados con desparpajo sino, por el contrario, la “pequeña historia” contenida dentro de esa gran historia, una de “chico persigue chica” que tiene como protagonistas a los jóvenes Dane DeHaan y Cara Delevingne.

Besson, que lanzó al estrellato a Natalie Portman con “El perfecto asesino”, vuelve así a trabajar con talento juvenil, y apuesta por dos estrellas de fuerte arraigo en las redes sociales, que podrían permitirle recuperar la costosa inversión de nueve años de trabajo y 200 millones de dólares.

“Conocía el trabajo de Dane, y cuando nos encontramos para charlar del proyecto, a los 20 segundos sabía que el papel era suyo: esa voz, esa sonrisa, esa actitud... Entonces, me dio miedo: si llegaba a decir que no, estaba al horno”, dijo entre risas sobre la elección de su héroe.

Pero a la hora de encontrar a su contraparte, no todo fue tan sencillo: “Con Cara fue diferente, no la conocía, ella es una gran súper modelo y parecía muy loca... pero yo no juzgo a nadie, estoy acostumbrado a que se digan cosas de mí en los medios. Así que lo único que quería era conocerla, saber si era real, si realmente quería ser actriz”, reveló.

Y contó riendo como un villano que “nos encontramos cuatro veces, y nunca hablé del filme, solo quería determinar si iba en serio. Y finalmente le dije que tendríamos que hacer algunos ejercicios... y la torturé durante seis horas con ejercicios”.

A tal punto llegó el experimento de Besson que, horas después, “me llamó su agente y me preguntó qué había pasado con Cara, que no paraba de llorar”.

“Estuvo perfecta, el papel es suyo”, respondió entonces Besson, quien reveló a los periodistas que había método detrás de aquella locura: “No podés hacer una película durante seis meses si no estás seguro que una persona está decidida a dar su sangre”