Polleras prohibidas y polleras decisivas

Por | ALEJANDRO CASTAÑEDA  

Mail: afcastab@gmail.com    
Periodista y crítico de cine

Gasalla prohibió las polleras. Su empleada pública en ¡Hola Susana! reclama para sí todas las faldas del programa. Se considera el único artista con derecho a usar atuendo femenino. Se sintió molesto cuando Los Midachi anduvieron travestidos y zafados frente a sus narices. También se quejó cuando Fátima Flórez -¡y con pollera!- asumió el rol de la ex presidenta Cristina y le robó miradas a la desgastada empleada. Antonio es un divo de este tiempo. No quiere compartir boleta con nadie. Y sabe que los candidatos de hoy se cuelgan de las mejores polleras. ¿Y si un día se siente dueño de las sonrisas domingueras y prohibe que los invitados hagan reír en su presencia? Sólo Susana puede usar vestidos ajustados en medio de ese torrente de juveniles Susanos que le alegrarán la vista a una estrella del humor que, como no puede ser mujer para siempre, se conforma serlo de a ratitos y prohibir a otro cualquier intento. Ahora anunciaron que Martín Bossi se sumaría al elenco. Gasalla pidió revisar vestuario, peluca y contrato antes de aceptarlo. Sus pretensiones fueron lejos. Lo de las polleras excluyentes ¿es para el INADI o para Susana?

Pero lo de Gasalla hizo escuela. La policía de Arabia Saudí arrestó el martes a una joven que aparece en un vídeo paseando por una zona histórica vestida con una minifalda y una blusa corta. El vídeo se hizo viral en diversas redes sociales después de que la usuaria identificada como “Model Khulood” lo compartió el fin de semana. Un portavoz de la policía ha declarado que la mujer fue interrogada y confesó haber estado en el lugar del vídeo, aunque negó ser la dueña de la cuenta. El Comité para la Promoción de la Virtud y la Prevención del Vicio (ya el nombre mete miedo) de Arabia Saudí pidió el lunes que se juzgue a la chica por llevar “ropa indecente”. Las polleras por allá son más prohibidas que las de Hola Susana. Y andar con mini es para combatientes suicidas. Arabia Saudi es “uno de esos países –como decía Paco Umbral- sin otra política ni economía que la religión”. Su paseo fue un gesto libertario y un alarde contra el machismo soterrado de esas religiones que ponen a la mujer como ejemplo del pecado. Y a su vestimenta, como un anzuelo que lleva fatalmente a la tentación. La chica, fresca y muy dispuesta, confirma que una veinteañera en minifalda traspasa cualquier restricción. Y que, para la mujer con lindas piernas, siempre es verano.

Más polleras. Las señoritas que con sus infidencias y sus mensajitos habían tenido a mal traer a unos señores muy conocidos y muy acompañados, de a poco se han llamado a sosiego. Después del tembladeral, muchas parejas en crisis pasaron de la bronca a la reconciliación. Latorre y Yanina volvieron a compartir lecho frente al oleaje de Punta del Este. Buena playa para un amor que estuvo cerca del naufragio por exceso de pique. Scioli parece haber firmado la paz con su cordobesa y su cigüeña. Y alentado por una economía que sigue en pañales, ya se afianza como padre primerizo y candidato veterano. Hasta Cubero y Nicole están en plan revisionista. Después de un par de permitidos recuperaron algunos gestos hogareños, aunque el sofá sigue allí, a disposición de un esposo que acampaba lejos y que, a falta de sábanas acariciadoras, se desquitaba con los almohadones. Las mascotas que duermen con Nicole ya han empezado a refunfuñar y a preparar su partida. Y los hijos gestionan para que papi haga uso de los fueros matrimoniales y pueda hacer pre temporada en el dormitorio de mami.

Para el final, tres polleras que monopolizan las PASO y dominan la pasarela política: Cristina, Lilita y Margarita. Los hombres que las secundan han tenido que dejar su lugar a quienes monopolizan chances, denuncias y protagonismo. Una es viuda, la otra divorciada y la tercera, esposa. Tres ejemplos femeninos que agotan un catálogo que va de ama de casa a señoras transitadas. La presencia y el atractivo, vale. La ex presidenta en el terreno de la pura coquetería saca mucha ventaja. Su silueta hace diferencia en los reality que ha montado a cielo abierto. Lilita y Margarita, en cambio, a la sombra de la política han visto engordar ego y cintura. ¿No se podrá juntarlas en un debate? Es la única polémica que podría acaparar verdadero interés. Porque han desafiado los cupos para ubicarse por encima de todos los contendientes. Y son como esa mini arábiga que interpeló encarnizadas tradiciones con un aletear distinto. Más allá de sus profundas diferencias, comparten un resplandor que convierten en pollerudos y pelotudos a gran parte de sus compañeros de campaña. Aunque Gasalla se enfurezca, son muchos los que hoy andan colgados de varias polleras. Lilita y Margarita tramitan acusaciones en un escenario con pocos inocentes. Y mientras la Gobernadora gasta timbre y sonrisas, el peronismo se ha subrogado en diferentes formatos para renacer desde el vientre de una ex que sueña con otro alumbramiento.

Los hijos de Cubero y Nicole gestionan para que papi haga uso de los fueros matrimoniales y pueda hacer pre temporada en el dormitorio de mami

Gasalla prohibió las polleras en ¡Hola Susana!. Antonio no quiere compartir boleta con nadie. Sabe que los candidatos de hoy andan colgados de las polleras