Golpearon a una mujer de 86 años en un asalto en barrio Hipódromo

Andaban por el barrio, viendo a quién le podían robar, y justo detectaron a una de las víctimas más débiles que se podrían haber cruzado: una jubilada de 86 años, que justo estaba entrando a su casa de barrio Hipódromo, ayer cuando caía la tarde.

Esa fue la antesala de más de media hora de pánico para la mujer, que vive sola y no tuvo manera de defenderse. Los dos ladrones, aparentemente jóvenes, no tuvieron reparos a la hora de increparla y de obligarla a ingresar con ellos a su vivienda de 116 entre 34 y 35.

Ocurrió cerca de las 18. Se desconoce en qué vehículo andaban y si tenían algún cómplice que manejaba la situación desde afuera.

atada y ahorcada

Por la fuerza y bajo amenaza, a la víctima la condujeron hasta una habitación. Allí la ataron de piernas y hasta comenzaron a ahorcarla con una bufanda suya. “Me hicieron como un bozal, que me metieron en la boca”, le contó la mujer a EL DIA haciendo la mímica de cómo le tapaban la boca con ese abrigo de lana.

De nada sirvieron los pedidos desesperados de la jubilada, que pidió expresamente que se reserve su identidad. “Podés ser mi hijo, o mi nieto”, llegó a remarcarle para lograr algo de compasión, que nunca obtuvo.

El castigo que le propinaron también incluyó golpes, que le aplicaron con el arma de fuego que al menos uno de ellos portaba.

Reducida por completo, se quedó inerte mientras los ladrones sacaban cajones, tiraban la ropa de los placares y se encargaban de registrar hasta el último rincón.

La postal que quedó en el domicilio fue la de un desorden total. En adición, la falta de tres mil pesos y de algunos documentos de la víctima completaron un panorama desolador.

saltar una ventana a los 86

Una vez que la pesadilla parecía terminada, la víctima se liberó como pudo y tuvo que hacer un esfuerzo más, para escaparse de su cuarto al patio trasero por una ventana.

Desde ahí gritó auxilio y algunos vecinos la ayudaron. Fueron ellos los que avisaron al 911 y se quejaron por la presunta demora de la policía en llegar.

Voceros del caso deslizaron que ese par de delincuentes habrían sido también los autores del robo de un auto, que se registró con pocos minutos de diferencia a sólo una cuadra. Sin embargo, no se precisó si ese hecho fue anterior o posterior a la entradera a la jubilada.

Pese a los esfuerzos que hizo la policía por ubicarlos, anoche permanecían prófugos. Un estudio pericial fue encargado para “levantar” las huellas de los sospechosos. La jubilada apenas se estaba recuperando.