Kapanga, cuando la música es alegría
| 15 de Octubre de 2007 | 00:00

Con la vitalidad y la alegría características de toda su obra, el grupo de rock Kapanga editó "Crece", su séptima producción discográfica.
Cristian Algañaraz y Miguel de Luna Campos -guitarrista del conjunto- fueron los productores del trabajo, integrado por 13 canciones sencillas y contundentes y dos bonus tracks.
En gran parte del disco, el grupo retoma su habitual clima festivo, a medio camino entre Los Auténticos Decadentes y Bersuit Vergarabat. Así aparecen, mezcla de ska y cuarteto, potenciales hits como "Contramano", "Perdoname" y "Quiero".
En la misma línea se destacan por sus letras "Mesa 4", que describe las aventuras cotidianas de un mozo, y "Hombres rata", canción que habla metafóricamente sobre los políticos.
"Crece" también tiene lugar para el reggae en "Para mí" y "Murmullo" y para el rock con aires a los años 60 en "Un lugar" -el optimista primer corte de la placa- y "Me voy yendo".
Pero Kapanga también tiene nuevas canciones que exceden todos los encasillamientos estilísticos del conjunto, como el esperanzado folk "Crece", sin duda uno de los temas más logrados y originales del disco, o "Una nube", que parece un tema de "Cantaniños" con letra lisérgica.
La placa cierra con "Marcel Marceau", un homenaje al mimo francés que es, en realidad, un track de un minuto de silencio. El trabajo se completa con la versión demo de "Para mí" y una rendición en formato acústico del tema que da título al disco.
Cristian Algañaraz y Miguel de Luna Campos -guitarrista del conjunto- fueron los productores del trabajo, integrado por 13 canciones sencillas y contundentes y dos bonus tracks.
En gran parte del disco, el grupo retoma su habitual clima festivo, a medio camino entre Los Auténticos Decadentes y Bersuit Vergarabat. Así aparecen, mezcla de ska y cuarteto, potenciales hits como "Contramano", "Perdoname" y "Quiero".
En la misma línea se destacan por sus letras "Mesa 4", que describe las aventuras cotidianas de un mozo, y "Hombres rata", canción que habla metafóricamente sobre los políticos.
"Crece" también tiene lugar para el reggae en "Para mí" y "Murmullo" y para el rock con aires a los años 60 en "Un lugar" -el optimista primer corte de la placa- y "Me voy yendo".
Pero Kapanga también tiene nuevas canciones que exceden todos los encasillamientos estilísticos del conjunto, como el esperanzado folk "Crece", sin duda uno de los temas más logrados y originales del disco, o "Una nube", que parece un tema de "Cantaniños" con letra lisérgica.
La placa cierra con "Marcel Marceau", un homenaje al mimo francés que es, en realidad, un track de un minuto de silencio. El trabajo se completa con la versión demo de "Para mí" y una rendición en formato acústico del tema que da título al disco.
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