Otro abuso en un jardín de infantes
Acusan a un empleado de atacar a una niña en un establecimiento del barrio de Caballito
| 16 de Noviembre de 2007 | 00:00
Un empleado de un jardín de infantes del barrio porteño de Caballito fue acusado de abusar de una niña de tres años, por lo que la denuncia quedó radicada en los tribunales de la ciudad de Buenos Aires, informaron ayer fuentes policiales.
El acusado es un hombre de 60 años, empleado del jardín de infantes "El Girasol", que está ubicado en la calle Méndez de Andes al 700. Según la mamá de la nena, cuyos datos de identificación fueron resguardados, el hombre manoseó a la menor en reiteradas oportunidades.
El miércoles, la mamá radicó la denuncia por "abuso deshonesto" en la comisaría 13 y ante la Fiscalía número 40 a cargo de la doctora Estela Andrade de Segura. Según pudo averiguarse, el acusado es también abuelo de una alumna del jardín, y por el supuesto abuso fue citada a declarar la directora del establecimiento, para que brinde detalles del funcionamiento interno de la institución.
Modalidad repetida
Por otra parte, en la provincia de Chaco, un paramédico detenido acusado de haber violado al menos a dos menores en la ciudad de Villa Angela, se negó a prestar declaración indagatoria ante la fiscal Graciela Griffith Barreto.
Ante la negativa, la fiscal resolvió caratular la causa como "abuso sexual gravemente ultrajante calificado". La nueva acusación modifica la carátula anterior que era de "abuso sexual con acceso carnal agravado", con lo que la situación del detenido se complica aún más y en caso de ser hallado culpable en el juicio al que será sometido, la pena podría ir hasta 25 años de prisión, señalaron las fuentes.
El sujeto fue trasladado al despacho de la fiscal con la asistencia jurídica del defensor oficial de turno, Gonzalo Molina, ya que por el momento no ha designado abogado defensor, pero se negó a declarar amparándose en su derecho constitucional.
Sospechas oscuras
Tras el trámite procesal, el acusado volvió a ser alojado en dependencias de la Dirección de Investigaciones de la Policía chaqueña. Mientras tanto continuarán las diligencias judiciales relacionadas con la investigación que viene llevando adelante la fiscal Griffith Barreto, tanto en Villa Angela como en otras ciudades vecinas en donde el paramédico también estuvo trabajando y donde se sospecha podría haber cometido delitos similares.
Según señalaron fuentes vinculadas a la investigación, se está tratando de establecer por un lado el número concreto de víctimas, teniendo en cuenta que la fiscal posee pruebas "contundentes" sobre dos hechos, así como también los lugares en los que supuestamente se cometieron los delitos.
El acusado, miembro de una conocida familia de Villa Angela, fue detenido el sábado 10 de noviembre, luego que la fiscal Griffith Barreto recibiera un anónimo con filmaciones y fotografías de violaciones a una niña de ocho años.
Las filmaciones fueron realizadas con un teléfono celular y corresponden a hechos ocurridos entre el mes de diciembre del 2005, febrero del 2006 y junio del 2007. En un allanamiento realizado en la vivienda del acusado, se hallaron los originales de las filmaciones, además de abundante material pornográfico del que eran protagonistas niñas de entre cinco y ocho años.
El acusado es un hombre de 60 años, empleado del jardín de infantes "El Girasol", que está ubicado en la calle Méndez de Andes al 700. Según la mamá de la nena, cuyos datos de identificación fueron resguardados, el hombre manoseó a la menor en reiteradas oportunidades.
El miércoles, la mamá radicó la denuncia por "abuso deshonesto" en la comisaría 13 y ante la Fiscalía número 40 a cargo de la doctora Estela Andrade de Segura. Según pudo averiguarse, el acusado es también abuelo de una alumna del jardín, y por el supuesto abuso fue citada a declarar la directora del establecimiento, para que brinde detalles del funcionamiento interno de la institución.
Modalidad repetida
Por otra parte, en la provincia de Chaco, un paramédico detenido acusado de haber violado al menos a dos menores en la ciudad de Villa Angela, se negó a prestar declaración indagatoria ante la fiscal Graciela Griffith Barreto.
Ante la negativa, la fiscal resolvió caratular la causa como "abuso sexual gravemente ultrajante calificado". La nueva acusación modifica la carátula anterior que era de "abuso sexual con acceso carnal agravado", con lo que la situación del detenido se complica aún más y en caso de ser hallado culpable en el juicio al que será sometido, la pena podría ir hasta 25 años de prisión, señalaron las fuentes.
El sujeto fue trasladado al despacho de la fiscal con la asistencia jurídica del defensor oficial de turno, Gonzalo Molina, ya que por el momento no ha designado abogado defensor, pero se negó a declarar amparándose en su derecho constitucional.
Sospechas oscuras
Tras el trámite procesal, el acusado volvió a ser alojado en dependencias de la Dirección de Investigaciones de la Policía chaqueña. Mientras tanto continuarán las diligencias judiciales relacionadas con la investigación que viene llevando adelante la fiscal Griffith Barreto, tanto en Villa Angela como en otras ciudades vecinas en donde el paramédico también estuvo trabajando y donde se sospecha podría haber cometido delitos similares.
Según señalaron fuentes vinculadas a la investigación, se está tratando de establecer por un lado el número concreto de víctimas, teniendo en cuenta que la fiscal posee pruebas "contundentes" sobre dos hechos, así como también los lugares en los que supuestamente se cometieron los delitos.
El acusado, miembro de una conocida familia de Villa Angela, fue detenido el sábado 10 de noviembre, luego que la fiscal Griffith Barreto recibiera un anónimo con filmaciones y fotografías de violaciones a una niña de ocho años.
Las filmaciones fueron realizadas con un teléfono celular y corresponden a hechos ocurridos entre el mes de diciembre del 2005, febrero del 2006 y junio del 2007. En un allanamiento realizado en la vivienda del acusado, se hallaron los originales de las filmaciones, además de abundante material pornográfico del que eran protagonistas niñas de entre cinco y ocho años.
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