El Concejo de San Cayetano echaría al contador municipal
| 31 de Julio de 2008 | 00:00

El intendente de San Cayetano, Miguel Gargaglione (UCR), envió al Concejo Deliberante un proyecto de ordenanza destinado a conseguir la "baja" del contador municipal, luego de que este último se negara a renunciar -como se lo pidió el jefe comunal- por estar presuntamente involucrado en una denuncia por el faltante de 180 tubos de hormigón comprados en la anterior administración municipal, que encabezaba el kirchnerista Miguel Stornini.
Hace un par de semanas, el contador municipal, José María Cinalli, justificó su decisión de continuar en el cargo por considerar que "no es facultad del intendente pedirme que renuncie, porque el titular de este cargo puede ser removido con un pronunciamiento del Concejo Deliberante".
Así fue como el intendente envió un proyecto que establece el desplazamiento de Cinalli al Concejo, integrado por dos bloques, UCR y FpV, de cinco ediles cada uno, de modo que de registrarse un empate deberá dirimir la cuestión la presidencia del cuerpo, en manos del oficialismo.
El faltante de los caños es objeto de una investigación judicial y, en ese contexto, recientemente la fiscal de Necochea Silvia Gabriele afirmó estar "totalmente convencida" de la existencia de un delito patrimonial y no descartó que en el caso se haya dado una asociación ilícita con la participación de actuales y ex funcionarios municipales.
Por su lado el intendente Gargaglione afirmó que "en cámaras ocultas que se instalaron hace cuatro meses en mi despacho aparecen imágenes que comprometen a Cinalli en relación a la compra y faltante de 180 tubos de hormigón en la gestión de Stornini" y señaló que "las copias de los videos están siendo evaluadas por la Justicia".
Consultado por este diario, Cinalli se excusó de responder a esa acusación porque "en esta cuestión viene trabajando la Justicia, por lo que sólo voy a hablar una vez que esté el fallo correspondiente".
Hace un par de semanas, el contador municipal, José María Cinalli, justificó su decisión de continuar en el cargo por considerar que "no es facultad del intendente pedirme que renuncie, porque el titular de este cargo puede ser removido con un pronunciamiento del Concejo Deliberante".
Así fue como el intendente envió un proyecto que establece el desplazamiento de Cinalli al Concejo, integrado por dos bloques, UCR y FpV, de cinco ediles cada uno, de modo que de registrarse un empate deberá dirimir la cuestión la presidencia del cuerpo, en manos del oficialismo.
El faltante de los caños es objeto de una investigación judicial y, en ese contexto, recientemente la fiscal de Necochea Silvia Gabriele afirmó estar "totalmente convencida" de la existencia de un delito patrimonial y no descartó que en el caso se haya dado una asociación ilícita con la participación de actuales y ex funcionarios municipales.
Por su lado el intendente Gargaglione afirmó que "en cámaras ocultas que se instalaron hace cuatro meses en mi despacho aparecen imágenes que comprometen a Cinalli en relación a la compra y faltante de 180 tubos de hormigón en la gestión de Stornini" y señaló que "las copias de los videos están siendo evaluadas por la Justicia".
Consultado por este diario, Cinalli se excusó de responder a esa acusación porque "en esta cuestión viene trabajando la Justicia, por lo que sólo voy a hablar una vez que esté el fallo correspondiente".
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