Un campeón de ajedrez

Cuando en 1964, a las 14 años, Jorge Jaime Bibiloni se inició en los secretos que escondían los 64 casilleros blancos y negros del tablero de ajedrez, se sintió encandilado por la magia de ese juego milenario y se encendió una pasión que se prolongó durante toda su vida.

Impulsado por ese entusiasmo, dedicó innumerables horas al estudio de los libros de los más destacados maestros de todo el mundo, y apenas dos años después, en 1966, se consagró Campeón Juvenil Platense.

Desde entonces, se convirtió en un protagonista central del juego ciencia en la Región. Alejandro Giampa, presidente del Club de Ajedrez La Plata, se mostró conmovido por la noticia de su trágico fallecimiento: "Fue una figura muy conocida y querida en toda la comunidad ajedrecística. Para nuestra ciudad, es una pérdida enorme. Se va un amigo y animador permanente de cuanto torneo hubiera", expresó.

Bibiloni supo compatibilizar su labor como abogado con su amor por el ajedrez. Y se dio el gusto de disputar algunos de los torneos más importantes del calendario internacional. Entre otros eventos, participó del torneo "Aeroflot" en Rusia, del famoso Abierto de Nueva York, de los campeonatos Continentales de las Américas disputados en Colombia y Brasil y de numerosos torneos a nivel nacional.

Cumplió su sueño de enfrentarse a varios de los mejores ajedrecistas del país y del mundo, y logró vencer o empatar con varios de ellos (Hugo Spangenberg, Pablo Zarnicki, Gilberto Hernández, entre otros). Disputó matches con el gran maestro local Carlos García Palermo, y fue bicampeón de la Ciudad.

Su próximo desafío era un torneo de ajedrez entre abogados, en Mar del Plata. Seguía con el mismo entusiasmo con que a los 14 años se fascinó entre jaques y enroques. Y se lanzó a viajar solo, como tantas veces lo había hecho. La muerte lo sorprendió demasiado temprano. Cientos de aficionados hoy lo recuerdan, entre lo negro y blanco del camino.

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