Se despide otra promoción del Nacional

Con música, bailes, mucho color y calor, los estudiantes de sexto año del Nacional celebraron el final del ciclo lectivo que “los despide” como bachilleres.

La alegría, como siempre ocurre en este tipo de acontecimientos, dejó en más de un momento lugar a los abrazos y las lágrimas.

“No es para menos. Se termina uno de los mejores momentos de la vida”, dijo un preceptor, quizás recordando cuando él lo vivió en primera persona.

El patio fue decorado por los propios alumnos con cintas y banderas, y se convirtió en el escenario donde los flamantes bachilleres disfrutaron, bailaron y se emocionaron junto a sus compañeros, profesores, preceptores y no docentes que los acompañaron en estos inolvidables años.

Como cada fin de ciclo, el epílogo de los festejos -que se llevaron a cabo durante la mañana- tuvo como protagonistas casi exclusivos a la emoción y las lágrimas. El tradicional abrazo de todos los egresados en el centro del patio dio cuenta de la importancia de la etapa que “se va” y del inolvidable paso por el Colegio Nacional