Revuelo en Brandsen por notas “mejoradas” por un directivo

Un integrante del equipo directivo de la Escuela Secundaria N° 1 de Brandsen cambió las notas de varios alumnos con el objetivo de que aprobasen aquellas asignaturas que, por “méritos” propios, habían reprobado. La incomprensible acción -denunciada por el Semanario Tribuna de esa localidad- tuvo, por lo menos, dos consecuencias. Como la directora de la institución descubrió la falsificación a tiempo y las notas adulteradas no llegaron a los boletines, los jóvenes se llevaron las materias y el docente en cuestión va camino de ser sumariado.

El asesor de la dirección de Inspección General de Educación bonaerense, Nelson Herrera, confirmó a este diario que “la directora del colegio y la inspectora del nivel secundario iniciaron una investigación que en este momento se encuentra en la Jefatura Regional, y que probablemente mañana (por hoy) llegue a la dirección provincial de Educación Secundaria, donde se decidirán los pasos a seguir”.

En los ámbitos oficiales hablan de “presunta” alteración de documento público. Pero extraoficialmente pudo saberse de fuentes calificadas que la alteración existió, que su autor sería el director “no reasignado” o “fuera de planta” (ver destacado) Félix Ilarragorri y que el final “cantado” de esta historia es la instrucción de un sumario administrativo que puede derivar en la suspensión del profesor.

Los motivos por los cuales falsificó las notas de “al menos tres profesores”, dijo Herrera, aún no están claros. Algunas fuentes hablan de “un favor que le quiso hacer a alumnos que estaban a poco y nada de aprobar”. En cambio, otras voces opinan que el integrante del equipo directivo de la Secundaria 1 actuó de ese modo para evitar que la escuela perdiese matrícula “por repitencia y deserción”. La investigación que se sigue en la cartera educativa determinará los porqué y las sanciones. “Es que en un caso así, las causas del comportamiento poco importan”, indicaron a nivel oficial.

una historia incomprensible

El funcionario Nelson Herrera relató que “el 14 de diciembre, la directora de la escuela (Alicia Rosales) detectó que en al menos 3 planillas correspondientes al informe de calificación del último trimestre había notas enmendadas y no salvadas”.

Las planillas correspondían a alumnos del ciclo básico (1°, 2° y 3° año). “Como cada docente presenta una, los damnificados, en principio, serían tres profesores”, indicó, para explicar que al no estar salvadas las correcciones (en esos casos el docente suele aclarar ‘vale x’, especificando la nota correcta), la directora los llamó para que “ratifiquen o rectifiquen la calificación. Y todos coincidieron en que esas no eran las notas que ellos habían puesto”, afirmó Herrera.

Fue entonces cuando Alicia Rosales dio aviso a la inspectora del nivel secundario, Adriana Díaz, y tras “la confección correcta de los informes por parte de los profesores, se labraron las actas correspondientes detallando la situación y se inició una investigación”.

La acción de la directora “evitó que las notas falsas llegaran a los boletines, de manera que esos alumnos tendrán que recuperar las materias correspondientes”, aclaró.

¿En qué consiste una investigación de este tipo? “Se recaban todos los elementos que permitan a las autoridades superiores determinar si existió alteración de un documento público, como copias de las planillas enmendadas, informes de los profesores, entrevistas a directivos y docentes, entre otras cosas”.

Esa documentación sigue un circuito determinado. De la escuela se eleva a la Jefatura Distrital, luego a la Jefatura Regional, y finalmente a la dirección provincial de Educación Secundaria. Allí se deciden los pasos a seguir. Y en caso de labrarse un sumario, se constituye el Tribunal de Disciplina. Si se comprueba un hecho ilícito, la sanción puede ser la suspensión. Pero hoy todo eso es hipotético, debe proseguir y finalizar la investigación”, enfatizó.

lo que dijo la inspectora

En declaraciones que realizó al portal InfoBrandsen, la inspectora Díaz dijo que “por la investigación que yo tengo aparentemente los cambios existieron (...) por el director no designado que tiene la institución, que es el profesor Félix Ilarragorri”.

“Escuché su descargo y dijo haber actuado con las mejores intenciones, pero reconoció haber cometido un grave error (...) Estos errores hay que pagarlos de alguna manera, porque no pueden existir tan burdamente y con algo tan delicado como es el proceso de enseñanza y aprendizaje”, opinó.