El reloj solar de Tolosa ya luce su aspecto renovado

Por el vandalismo y el paso del tiempo, la obra se encontraba en avanzado estado de deterioro

Singular pieza del patrimonio escultórico platense, el reloj de sol instalado en el Distribuidor “Pedro Benoit” se encontraba visiblemente dañado, a causa del vandalismo y las marcas del paso de los años. Por eso, un equipo de restauradores de monumentos de la Ciudad puso manos a la obra y recuperó la máquina para medir el tiempo que es una reproducción de una pieza que posee la región de Valencia, en España.

La restauradora Laura Córdoba dijo que la intervención incluyó distintas tareas. “Se retiraron con removedor por medio de acción manual y mecánica los grafittis de la almendra, lugar soporte donde refleja los números. Se quitaron las pintadas del aro de acero inoxidable que envuelve la almendra y la totalidad de la superficie donde apoya la almendra fue completada en sus faltantes cementicios”.

Los restauradores contaron que el entorno también se intervino por completo. Los bancos fueron lijados por acción mecánica y protegidos con cetol tinte algarrobo, se colocó un cesto de basura de material desplegable, se repusieron 3 mástiles, con sus respectivas banderas argentina, bonaerense y se confecciono la bandera del Rotary para el lugar.

También se informó que en la base del reloj se colocará en acrílico la leyenda “Bienvenido a Tolosa”.

Estos trabajos, según se indicó, se desarrollaron en el marco de los 46 años que cumple el Rotary Club de Tolosa, que fue fundado el 11 de junio de 1969.

En el Distribuidor Pedro Benoit y por iniciativa del Rotary Club tolosano, se instaló hace cinco años la pieza en cuyo diseño intervinieron científicos y artistas españoles

la obra

La bajada del Distribuidor hacia avenida 520, con dirección Ensenada, alberga la aguja o estilete de 5 metros de altura -un cilindro de acero inoxidable, calado con los números y puntos que permiten identificar las horas y sus subdivisiones-, y el “limbo” o esfera, un óvalo de chapa en el que se proyectarán las sombras. Ambas piezas fueron empotradas en una base circular de concreto.

El reloj fue el aporte de la entidad rotaria, en el marco de la celebración del bicentenario de la gesta patria de 1810. Con cinco metros de diámetro, emula el que se encuentra en la localidad valenciana de Beniganim; fue diseñado por Joan Olivares Alfonso, escritor y catedrático en el IB de Albaida, con la colaboración del artista plástico Rafael Amoros.

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