Polémica jurídica por un experimento literario

Un escritor argentino fue demandado por supuesto plagio a Borges. Su proceso despertó la defensa de otros autores

Escritores y figuras de la cultura expresaron en los últimos días su repudio al procesamiento del escritor Pablo Katchadjian, quien enfrenta una demanda de plagio por parte de María Kodama, viuda y heredera universal de Jorge Luis Borges, a raíz de El Aleph engordado , libro que suma 5.600 palabras a las 4 mil de la célebre obra El Aleph .

“La defensa colectiva y la insistencia en el desprocesamiento de Katchadjian son una forma de defensa de la libertad creativa, de los medios editoriales independientes y de la diversidad estética y crítica que toda cultura saludable requiere”, señala la carta pública que se leyó en la Biblioteca Nacional. Los presentes -entre quienes se encontraban María Pía López, directora del Museo del Libro y de la Lengua; César Aira y el propio Katchadjian- invitaron “a los jueces y autoridades y lectores en general a que lean con atención El Aleph engordado , antes o después de leer o releer El Aleph para así “extraer conclusiones en cuanto a la propiedad intelectual del libro en cuestión”.

El encuentro contó con el apoyo de más de 2.500 escritores editores y artistas que sumaron sus firmas en el sitio http://alephengordado.blogspot.com.ar, creado en solidaridad con el escritor y poeta de la llamada nueva narrativa argentina. Se trata, entre otros, de Edgardo Cozarinsky, Ricardo Piglia, Silvia Molloy, Josefina Licitra, Tamara Kamenszain, el poeta Mario Ortiz, el escritor Alan Pauls y los artistas plásticos Roberto Jacoby y Osías Yanov.

El resonante caso llegó hasta el diario británico The Guardian, donde bajo el título “Re-trabajar Borges es un experimento legítimo, no es un crimen”, el crítico argentino Fernando Sdrigotti denunció que “el problema real no es la integridad literaria sino el valor financiero”, y advirtió que “las implicaciones de poner a los escritores en los tribunales por actos creativos son escalofriantes”.

El juez de instrucción Guillermo Carvajal trabó un embargo de 80 mil pesos sobre los bienes de Katchadjian y sostuvo que el libro es una “copia” de la obra de Borges, a la que se le “intercalaron palabras, frases y oraciones completas, sin ninguna diferenciación en su impresión”.

Kodama había obtenido fallos adversos en esta causa, hasta que la Cámara de Casación revocó el sobreseimiento y mandó dictar un nuevo fallo, llamando la atención en cuanto a que “se ha editado, vendido o reproducido en una edición gráfica una obra publicada sin autorización de su autor o derechohabiente”, es decir, persona cuyos derechos derivan de otra.

Asimismo, el magistrado calificó el hecho como una violación a los derechos de autor, protegidos por la denominada Ley de Propiedad Intelectual. Katchadjian, miembro de una generación de autores nacidos entre los ’70 y ’80, publicó novelas como Gracias en el sello independiente Blatt & Ríos o Qué hacer , publicada por Bajo la luna; y es creador de libros que proponen la deconstrucción de modelos narrativos canónicos, como El Martín Fierro ordenado alfabéticamente.

Biblioteca Nacional
César Aira
Edgardo Cozarinsky
Jorge Luis Borges
Josefina Licitra
María Kodama
Pablo Katchadjian
Ricardo Piglia

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE