Centros de diálisis alertan que un recorte de Pami los pone en jaque

La obra social de los jubilados eliminó el pago de un plus que comprometería su sustentabilidad

Edición Impresa

Tras dos años de pagarle a los centros de diálisis un incentivo de calidad de alrededor del 10% sobre el valor de cada prestación, las nuevas autoridades de Pami resolvieron el mes pasado eliminar del nuevo convenio este plus. Mientras la mayoría de la prestadores se niega todavía a firmarlo, una asociación que nuclea a más de un centenar de ellos en la provincia de Buenos Aires salió ayer a denunciar que las nuevas condiciones impuestas ponen en serio riesgo su sustentabilidad.

“El incentivo de calidad era un item que PAMI incluyó en el convenio de 2015 como una forma de compensar el hecho de que el módulo de prestación (es decir la sesión de diálisis, que hoy ronda en los $2.100) estaba atrasado y que no iba a pagar más. Si bien ese incentivo (que implicaba acreditar ciertos parámetros biológicos en la atención de los pacientes) era originalmente de hasta el 15% mensual sobre el valor del módulo, en la práctica nunca representaba más del 10%, pero aun así constituía para nosotros una compensación”, explica Alfredo Casaliba, presidente de la Asociación Regional de Diálisis de la Provincia de Buenos Aires y la Capital Federal.

“De pronto el mes pasado las autoridades de PAMI nos convocaron a las tres entidades que nucleamos a los centros de diálisis de todo el país para comunicarnos que ese incentivo no iba más. Pero además nos informaron que la medida iba a ser retroactiva al mes de julio, cuando el convenio subscripto establecía que debían informarnos con 30 días de anticipación. En suma, nadie aceptó firmarlo y el plazo para hacerlo ya venció”, cuenta el presidente de la Asociación.

“Hoy sin un convenio firmado, los centros de diálisis seguimos atendiendo a los más de 11 mil pacientes que nos envía PAMI cada mes y cobrando por ello lo que la obra social decide pagarnos en forma unilateral. Pero para nuestros centros, los pacientes de PAMI representan el 40% de sus ingresos; por lo que si no paga lo que el servicio vale, en dos o tres meses ya no vamos a poder seguir abonando sueldos, comprando insumos y cubriendo los gastos enormes que hoy tenemos por el alto consumo de luz y agua que implica nuestra actividad”, afirma Casaliba, quien viene “reclamando sin éxito alguna instancia de negociación”.

Al ser consultadas por el conflicto, fuentes de Pami explicaron ayer que “el incentivo de calidad se eliminó porque la calidad en la atención de los pacientes debe estar siempre. En compensación se aumentó el valor del módulo que, por otra parte, hoy es similar al que les pagan las demás obras sociales y empresas de medicina prepaga. Además hay una mesa de negociación abierta y otras entidades de prestadores ya han empezado a firmar el convenio”, aseguraron desde la obra social de los jubilados al señalar que “los afiliados deben estar tranquilos de que el servicio no se va a suspender”.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE