La escuela

POR GARGANTA

Hoy: La escuela

La escuela a la que fuimos los mayores no es la misma a la que asisten cuando hay clases nuestros hijos y nietos. Hoy van a la misma escuela a la que fuimos pero unas décadas más deterioradas. Se disfruta mucho el frío en invierno, el calor agobiante en verano y de la lluvia cuando el agua precipita por los techos y caños. Es una delicia impartir clases a niños con hambre, piojos, sarna, con violencia y con padres desocupados y casi analfabetos. Antes nos hacíamos la rata, ahora las ratas van a la escuela más que los alumnos. La escuela por suerte prepara a nuestros hijos para que sean los gobernantes del futuro, del futuro imperfecto, por supuesto. Estos tres chistes que leerán, los hice en el recreo el primero, en la clase de matemática el segundo y sobre el guardapolvos de una nena que me gusta el tercero.