“Pareció muy sospechoso y todo me generó un manto de dudas”

Todavía se habla del partido que Argentino de Merlo, rival directo de Cambaceres en la lucha por no descender, le ganó a Italiano por 1-0, con dos penales errados por parte del “azzurro” y una actuación que en el Rojo “levanta sospechas” en estos momentos donde está en juego la permanencia en la divisional.

Sebastián Martinetti, vicepresidente primero de Cambaceres y presidente de la Divisional C de AFA, habló ayer con este diario y contó sus sensaciones respecto de un tema delicado y que podría traer cola si se investiga a fondo.

“La realidad es que no hay pruebas, pero me parece sospechoso que jugadores que no erran penales, lo hayan errado en un mismo partido. Si hubo algo, no lo sé. Son ellos los que tienen que dar explicaciones. Las cosas se pueden enmascarar de cualquier forma, pero los dirigentes de Italiano, 48 horas después de ese partido, le dan de baja a once jugadores. Seguramente, el Tribunal de Etica de la AFA se pondrá investigar. Pero insisto, no tengo pruebas de que los jugadores fueron para atrás, sí mis sospechas y mis dudas de cómo se dio todo. Y si las tuviera, ya hubiese hecho la denuncia correspondiente”, explicó el dirigente de la institución de Ensenada.

Más adelante agregó que “también generó suspicacias el penal que le dieron a Argentino de Merlo. Pareció un regalo de Papá Noel. Son cosas que pasan... Con esto no quiero decir que estoy llorando, ni tampoco quiero tapar nada. Nosotros venimos de tres campañas muy malas, y por esa razón estamos peleando por mantenernos en la divisional”.

Cambaceres, que arrastra dos triunfos en cadena, sigue un punto por debajo de Argentino de Merlo en la tabla de los promedios. Y el domingo se juega gran parte de su suerte. Siguiendo con el partido que se disputó el martes en la cancha de Italiano, Martinetti enfatizó que “sabíamos que era casi imposible que Argentino de Merlo, que había sacado un sólo punto de 21, pudiera sumar de a tres ante un rival que pelea por meterse en el Reducido. Tampoco vi a los jugadores de Italiano con el tupé de querer ganar. No se fijan del esfuerzo que hacen los dirigentes para pagarle los sueldos. También se juega con la ilusión de los hinchas. Pero son ellos los que tienen que dar explicaciones. No creo que haya una mano negra, pues ya hubiésemos descendido mucho antes. Siempre confío en el jugador y en los dirigentes, pero esta vez, no hubo jugadores leales. Es una apreciación muy personal. Por eso estamos todos con bronca. No tengo pruebas para culpar a nadie. Y si las tuviera, habría hecho la denuncia en el Tribunal de Disciplina”.