Por el sushi y el champagne: ¿Qué pasó entre Karina y Dalila?

Ya pasaron las dos noches de festejo para Karina, que con dos Gran Rex repletos repasó los éxitos de sus 15 años de carrera. Una vez aplacada la emoción, salió a la luz un momento que opacó la doble celebración de la cantante tropical. En un video grabado en uno de sus conciertos, la artista manifiesta su pesar por la ausencia de una de sus invitadas al show: su colega Dalila.

“Le dejé el mejor camarín para ella, y la recibí con rosas. Dije: ‘Yo soy la princesa y ella la reina’. Pero antes de venir me dijeron que no venía. Yo, antes de ser egoísta, pregunté: ‘¿Cómo está?’. Porque capaz le pasó algo. Pero no, no le pasó nada”, comenzó explicándole a su público Kari, quien prosiguió: “Solo dijo: ‘Voy a salir del hotel solo para hacer mis shows y no voy a ir’...”. Me dolió mucho que no venga, porque me había prometido que iba a venir. Toda esta gente la iba a recibir con mucho amor”. Y añadió: “Igual, aunque me dejó pagando, la sigo respetando un montón”.

La palabra de la otra parte involucrada no se hizo esperar. La propia Dalila colgó un video en su Instagram para contar lo ocurrido: “Hola a toda la familia y el público de Buenos Aires. Lógicamente ya me enteré de todo y no quiero reír porque creo no tiene nada que ver con nada”, es la apertura de su descargo. “Yo con Karina no tengo nada. Está todo más que bien. Pero las internas son internas. Yo con Karina me sigo hablando. Ya lo discutí con ella”, reconoció la rubia.

Pero la cosa no quedó ahí, porque cuando los portales le consultaron sobre su ausencia a los show, soltó un poco más la lengua: “Yo no creo que las cosas sean para tanto. El problema es que el sushi y el champagne eran pago. Pero dale, no vamos a estar peleando por una cosa así. Nosotros le avisamos temprano a su staff”.

Al insistirle sobre el verdadero motivo de su ausencia, Dalila fue un tanto ambigua y dio pie a muchas suspicacias. “Ella tiene detrás de sus espaldas, personas que no la saben asesorar. No era para tanto. Es más, llego a pensar que les preocupó más que hayan tenido que comprar el sushi y el champagne a que yo no vaya”.