Fernando Samartín: “El público necesita seguir sintiendo cerca a Sandro”

Convertido en uno de los pocos tributos del ídolo aceptado por sus fans, el cantante y actor vuelve a La Plata para celebrar los 50 años del himno “Rosa, Rosa”

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Hace casi dos décadas que Fernando Samartín convive con la vida y obra de Sandro, a quien se dedica a tributar artísticamente con uno de los pocos shows aceptados ampliamente por los fans del Gitano, y con el que ha recorrido los principales escenarios del país y más allá, y con el que ha sido galardonado.

Sin embargo, lejos de “relajarse”, el joven cantante, actor e ilustrador dice que, por el contrario, cada vez es más intenso el estudio del mundo artístico de Roberto Sánchez, lo que lo hace admirarlo cada día un poco más.

“Soy muy perfeccionista, demasiado”, asegura Fernando Samartín en diálogo con EL DIA. Y cuenta que “al tener una visión ya macro de las canciones, empiezo a escuchar detallitos de interpretación que antes se me escapaban”.

Tantos años de estudio le han permitido mejorar en su técnica y desarrollar mejor su oído “para poder descifrar ciertas cosas que antes no”. Y ese, precisamente, es el reto que no lo hace bajar los brazos ni relajarse. “Pasa el tiempo y siento que el desafío es más grande porque lo tengo que hacer mejor”.

Samartín llegará esta noche al Teatro Metro de la mano de un nuevo espectáculo con el que homenajea los 50 años del inolvidable “Rosa, Rosa”. Según anticipa, en esta nueva propuesta pretende “celebrar al tema más icónico del Gitano y arrancamos con él, tal cual se grabó”. Aunque, claro, habrá más: “El show comienza con Sandro en plena época de los ‘70 y terminamos en el Gran Rex del 2000. Hay un viaje imaginario que lleva mucho laburo. Desde lo musical, puesta de luces y arreglos musicales. Ni hablar de que el último Sandro no canta como el primer Sandro. Hay muchas diferencias en cuanto a la interpretación”.

Para Samartín, Sandro es un ídolo popular “a la altura de Gardel y de Charly” porque “inventó un estilo, inventó canciones, inventó una manera de trabajar y de encarar los espectáculos”.

Entre sus grandes hazañas, el cantante remarca que el Gitano “logró capturar el gusto popular, con muy buen gusto y siempre fiel a él mismo”, y advierte su impronta en otros géneros musicales.

“Más allá de convertirse en baladista y cantante romántico nunca abandonó el rock. Les recomiendo escuchar con atención ‘Atmósfera Pesada’, que la graba una vez iniciada su carrera melódica, y tiene tanto rock que asusta. Es un imprescindible del rock and roll en castellano”, advierte.

“Más allá de sus baladas y canciones románticas, (Sandro) es un imprescindible del rock en castellano”

Fernando Samartín

 

Pasaron nueve años desde su muerte, sin embargo, sigue vigente. ¿Por qué? El joven cantante entiende que, “al igual Gardel o Freddie Mercury, Sandro, además de cantar, componer e interpretar como los dioses, creó un arquetipo. Un arquetipo que al día de hoy, al público le sigue haciendo falta”.

Por eso, dice el artista, su propuesta funciona. “Si bien nadie los va a igualar, siento que el público necesita seguir sintiéndolos cerca, y en vivo de alguna forma. No creo que nazca nuevamente alguien con tanta inteligencia y tanto talento combinado al servicio de la música y el espectáculo. Hay que tener demasiadas condiciones y Sandro las reunía todas. No sólo condiciones escénicas, sino de cómo manejar una carrera intacta a lo largo de 40 años”

Fiel admirador, Samartín reconoce que le debe “todo” a Sandro, “desde conocer una profesión de cantante hasta viajar por el mundo llevando su música. Nunca me voy a cansar de agradecerle”.

Y aunque la posibilidad de generar un proyecto propio con canciones propias lo seduce, reconoce que “no quiero dejarlo de lado, le debo mucho”.

Reconocido por sus fans, sus músicos y su familia, Samartín se sintió dolido por no haber sido tenido en cuenta para la producción televisiva que Telefé hizo sobre el Gitano, “Sandro de América”.

“Creo que merecía un casting y que el director me dijera: ‘No, pibe, lo tuyo es el teatro’ y listo. Me iba silbando bajito. Desde el día uno que empecé a investigar y leer sus biografías, como ‘Sandro, el Ídolo’ de Darío Suárez, siempre me lo imaginé como una película. Tenía los planos y las secuencias en mi cabeza. Y creo que mi condición de actor y cantante me daba para el rol. Pero no se dio. Cosas que pasan”, cierra.

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