Finn, “Game of Thrones” y el “terror” a los fans

En una entrevista con Time, Finn Wolfhard abrió por primera vez la intimidad de lo que vivió durante la filmación de la cuarta temporada de “Stranger Things”, cuando la presión de la fama y el peso de la serie lo llevaron a un ataque de pánico en pleno set.

El actor, que interpreta a Mike Wheeler y tenía apenas 13 años cuando la serie lo lanzó a la fama global, explicó que el éxito repentino tuvo un costo emocional: “Es solo un síntoma de lo que puede ser el cine: un caos”, declaró.

“Como actor infantil, intentas facilitarle las cosas a los demás. No sabes cómo defenderte. No sabes cómo pedir un descanso… Fue increíble y, a la vez, inconscientemente aterrador tener 13 años y que, de repente, todo el mundo supiera quién era”.

Durante el rodaje de “Stranger Things 4”, esa presión se intensificó por los protocolos post-COVID y por lo que él describe como “las típicas dificultades de una primera relación”. El estrés lo desbordó: “A mitad de una escena empecé a hiperventilar. Era como estar en una pecera porque muchos de los extras son fans. Culminó en una especie de ataque de pánico”.

Según relató Time, fueron sus compañeros Caleb McLaughlin y Gaten Matarazzo quienes lo acompañaron fuera del set y lo calmaron, recordándole que ellos también sentían el peso de las expectativas.

Esa presión volvió con más fuerza cuando empezaron a rodar la quinta y última temporada. El desafío ahora no era solo cerrar sus personajes, sino enfrentar el temor universal de cualquier serie de culto: el final.

Wolfhard no ocultó el miedo que atravesó el elenco:

“Sinceramente, creo que todos estábamos bastante preocupados. Después de cómo destrozaron ‘Game of Thrones’ en la última temporada, todos entrábamos en este proyecto pensando: ‘Esperemos que no nos pase algo así’. Pero luego leímos los guiones. Sabíamos que era algo especial”.

Los hermanos Duffer, cocreadores de la serie, confirmaron a Variety que llevan años escribiendo con ese desenlace en mente. Matt lo resumió así: “Sabíamos más o menos cómo sería la escena final desde hacía años; no fue algo que nos costara mucho trabajo idear”.