Amarillo de bronca

GASTON FERNANDEZ, UNO DE LOS JUGADORES AMONESTADOS EN LOS PRIMEROS MINUTOS. SE FUE REEMPLAZADO

La defensa falló, el mediocampo no encontró nunca las marcas y Diego Cagna no tuvo reflejos para cambiar la historia. Eso es cierto. Pero antes de la debacle, hubo un protagonista que le puso los pelos de punta a los hinchas de Estudiantes: Diego Abal, el árbitro del partido.

El juez, que si bien no protagonizó ninguna jugada polémica y pasó inadvertido para la mayoría del estadio tuvo una particularidad: amonestó a tres jugadores de Estudiantes en apenas 14 minutos de juego.

El primero de ellos fue Rodrigo Braña. El Chapu le cometió una infracción a Manuel Lanzini, la primera en todo el partido y Abal no lo dudó: amarilla. Iban 5 minutos.

El segundo fue Gastón Fernández, un jugador que no acostumbra a estar relacionado con el juego brusco. Pero a los 10 cometió una infracción intrascendente en la salida de River y recibió una insólita amonestación.

El tercer cartón amarillo lo vio Duván Zapata. Fue a los 14 minutos del complemento, cuando interrumpió un avance de River y Abal le mostró una tarjeta que pareció no merecer.

Fue en ese momento cuando los jugadores empezaron a reclamarle al árbitro más equidad y que entienda que es imposible jugar al fútbol sin rozar a un rival. A partir de ahí el brazo derecho de Abal dejó de buscar tarjetas en su bolsillo alto, al menos por un rato.

Su pasado lo condena

Las quejas de los jugadores adentro de la cancha, pero por sobre todas las cosas la de los hinchas en las redes sociales apuntaba a la tristemente célebre jugada del torneo pasado, cuando González Pirez le cometió un clarísimo penal a Maxi Núñez, que el propio Diego Abal ignoró a pesar de estar muy bien ubicado para sancionarlo.

Entonces, todos las miradas estuvieron puestas en él cuando a los 14 minutos del primer tiempo había sacado tres tarjetas amarillas a los jugadores visitantes.

Claro, en la medida que el equipo se fue desdibujando tanto adentro de la cancha las amarillas fueron solo una anécdota de una noche negra para Estudiantes en su visita al Monumental.

¿penal a auzqui?

Para colmo, en el segundo tiempo, cuando el reloj marcaba los 26 minutos Jonathan Bottinelli tomó de la camiseta a Carlos Auzqui, que Abal ignoró. Aquí su asistente número 1 Diego Bonfa tuvo mucha más responsabilidad que el pito. No lo vio.

Después de las repeticiones de la televisión quedó en evidencia que el defensor lo había sujetado, pero fue una jugada muy rápida que le quita cierta responsabilidad por haberla ignorado.