Terminó la prueba de testigos del juicio por el caso Piparo

EL JUICIO POR LA TRÁGICA SALIDERA A CAROLINA PIPARO AVANZA HACIA LA ETAPA DE ALEGATOS, QUE SE EXTENDERÍAN POR MÁS DE UNA SEMANA

El juicio oral y público que juzga a siete imputado por el caso de Carolina Piparo culminó ayer con la prueba de testigos del brutal ataque, luego de la salidera bancaria al Santander Río de 7 y 42.

El Tribunal Oral en lo Criminal II de Las Plata -integrado por los jueces Claudio Bernard, Liliana Torrisi y Silvia Hoerr- por la mañana escuchó a los padres de una testigo presencial del momento en que Carolina fue baleada, aquel trágico 29 de julio de 2010.

Los testigos explicaron que su hija vive en Misiones, que no puede venir hasta La Plata porque no tiene a quien dejar al cuidado de sus hijos.

Ante estas declaraciones el Tribunal hizo lugar a que la declaración de la testigo presencial sea incorporada al debate por lectura, ya que en su momento contó lo que vio ese día, en el que Carolina resultó herida de gravedad, lesiones que causaron la muerte, una semana después de su hijo Isidro, de nueve meses de gestación que nació mediante una cesárea de urgencia ante el cuadro que presentaba su madre, también con serios riesgos de vida, según declararon varios médicos en este juicio.

La testigo que no pudo asistir al debate es María de los Ángeles Muñoz, novia de Víctor Trebec, que en este juicio identificó al imputado Burgos como el autor del disparo a Carolina.

INCORPORADO COMO PRUEBA

El día del hecho estaba acompañado por Muñoz y luego, a las pocas horas del asalto, ambos reconocieron a Burgos en la comisaría segunda de nuestra ciudad. Lo señalaron como el tirador.

La defensa de otro imputado, ahora señalado por la acusación como el autor del disparo, Carlos Moreno, estaba interesada en ese testimonio.

La defensora oficial María Vigorelli, quien se había opuesto a la ampliación de la acusación formulada contra Moreno, logró ayer que ese testimonio -que lo beneficia a este último porque lo culpa a Burgos como el asaltante que gatilló- sea incorporado al juicio oral para ser valorado como prueba.

Por la trágica salidera, llegaron a juicio Burgos (20), Moreno (21); el hombre que está acusado de “marcar” a Piparo dentro del banco, Miguel “Pimienta” Silva (44); Luciano López (21), Juan Manuel Calvimonte (26) y Carlos Jordán Juárez (46) y Augusto Claramonte (45), quien llegó al debate en libertad.

Los siete hombres están acusados en la elevación a juicio de “asociación ilícita, robo doblemente calificado en concurso real con homicidio triplemente calificado por haber sido perpetrado con alevosía, con el concurso premeditado de dos o más personas y criminis causa en grado de tentativa”.

Además, se les aplicó el concurso ideal con “homicidio triplemente calificado por alevosía, por el concurso premeditado de dos o más personas y criminis causa para asegurar el resultado del delito agravado” por Isidro Buzali, el bebé que gestaba Piparo. Es que el fiscal que instruyó la causa, Marcelo Romero, consideró que la muerte de Isidro fue un homicidio, ya que “tuvo vida extrauterina, actividad cardíaca propia, respiratoria y cerebral”, y que su fallecimiento se produjo por las gravísimas lesiones que recibió su madre.