Un regreso a clases con énfasis en la contención psicológica

EN LA ESCUELA 84 DE VILLA ELVIRA, COMO EN CASI TODAS LAS DE LA CIUDAD, AYER SE RETOMÓ LA ACTIVIDAD

Las escuelas de la Ciudad abrieron ayer sus puertas y cumplieron una triple función. Por un lado, las maestras que pudieron ir a trabajar se pusieron al frente de sus aulas y dieron clase a los pocos chicos que dijeron presente. Por el otro, las propias docentes, junto con los directivos e integrantes de los gabinetes psicopedagógicos organizaron tareas que hicieron hincapié en la contención psicológica de los alumnos. Y, finalmente, todos los colegios se convirtieron en centros de recepción de donaciones para repartir entre las familias de la comunidad educativa afectadas por el devastador temporal.

En ese marco, la directora de Educación bonaerense, Nora De Lucía, subrayó: “Es importante que, dentro de la medida de lo posible, los padres envíen a los chicos a las colegios. Los estamos esperando con equipos especialmente preparados para darles contención psicológica y de salud”, dijo y destacó que “la escuela es una institución que, por su relación con los vecinos, puede hacer un trabajo muy importante sobre las necesidades de cada barrio, y es a lo que estamos abocados”.

ESCUELA “MULTIFUNCION”

Un ejemplo de las distintas funciones que asumieron las escuelas se pudo encontrar en la Primaria N° 84 de Villa Elvira. “Hoy hubo cien chicos sobre una matrícula de 800”, contó la directora, Cecilia Sgrilletti, quien comentó que “las maestras, que vinieron en un gran número (concurrió el 80 por ciento del plantel docente) trabajaron el tema de la solidaridad”.

“Los chicos estaban muy ansiosos por contar lo que les había pasado, y los más pequeños lo plasmaron en dibujos”, explicó, mientras mostraba las carteleras que ayer por la tarde ya estaban colgadas en el hall de entrada. Ver algunos de los dibujos era realmente conmovedor. La mayoría reflejaba casas con el agua adentro, elementos flotando y hasta algún coche destrozado por el temporal.

Sgrilletti señaló que “estamos recibiendo donaciones”, al tiempo que puso el acento en el trabajo que van a encarar de ahora en más. “En base al listado de alumnos ausentes, comenzaremos una tarea destinada a rastrearlos y ubicarlos para saber su situación y qué necesitan”, enfatizó.

Una situación similar se vivió en dos de los establecimientos más castigados de la Ciudad, como la Escuela N° 56 de diagonal 73 y 28 y en la Media N° 1 de 9 y 38.

“Lunes 8/4. Retomamos las clases. ¡Los esperamos!”, se leía en un pizarrón en la entrada de la Escuela 56, y el texto añadía: “Recibimos donaciones de útiles escolares, zapatillas y ropa para niños”.

Los útiles y los libros son elementos fundamentales para que las escuelas puedan ir retomando su ritmo, ya que fueron víctimas del diluvio tanto en las casas de miles de chicos como en muchísimos centros educativos, que incluso perdieron la biblioteca completa. En ese sentido, el Suteba repartió en la víspera kits de útiles escolares en 29 colegios. Las donaciones se reciben en 6 entre 46 y 47.

También hay escuelas, como la Técnica 9, que han puesto su maquinaria al servicio de la gente (ver aparte).