Ahora aparecieron los “quemamotos” en Berisso

EL ATAQUE OCURRIÓ ESTE FIN DE SEMANA EN 125 ENTRE 67 Y 68

Autos particulares, taxis... y ahora motos. Para los vándalos que tienen a la piromanía como pasatiempo nocturno, y provocan severas pérdidas materiales a los vecinos de la Región, cualquier rodado es potencial objeto de sus impulsos destructivos. Anteanoche le tocó a una familia de Villa Progreso perder en las llamas un scooter de mediana cilindrada.

El hecho ocurrió por la madrugada, entre el final del combate de boxeo entre Marcos Maidana y Floyd Mayweather y las primeras luces del alba, en 125 entre 67 y 68.

Aparentemente, los “quemamotos” actuaron con total impunidad, sin que nadie atinara a dar aviso a las fuerzas policiales de la zona, ubicada en la jurisdicción de Berisso (delegación la Franja) pero a sólo tres cuadras del límite con el partido de La Plata.

“Lamentablemente, no pude ser testigo ni hacer nada para evitar el fuego porque vivo en planta alta y contrafrente, y desde ahí no se escuchó nada” relató Javier Echeverry, dueño de la moto atacada, una Zanella 110.

“La dejé atada al paragolpes del auto, después de tomar las precauciones de siempre porque el barrio está cada vez más peligroso” explicó Echeverry: “acá se juntan grupitos en las esquinas a tomar vino o cerveza desde las cinco de la tarde, por lo que conviene sacarle la batería al coche y los plásticos a la moto si ‘duermen’ afuera. De todos modos, no se sabe si fue gente de la zona la que hizo la quema o vino de afuera”.

Aparentemente, los vándalos levantaron el asiento del scooter y arrojaron un elemento inflamable a modo de mecha en su tanque de combustible, por lo que en cuestión de segundos quedó envuelto en llamaradas de considerables dimensiones que amenazaban a los vehículos aledaños.

“Casi me queman el auto también, por suerte el viento soplaba para el otro lado” destacó Echeverry: “fueron los vecinos los que después de correr su auto le tiraron varios baldazos de agua a a la moto hasta que la apagaron”.

Los vecinos de Villa Progreso aseguran que es habitual toparse en las calles y descampados del lugar, particularmente a la vera de la avenida Perón a Los Talas, con “autos y camionetas tirados y quemados”, pero aclaran que “esto de prenderlos fuego en la puerta de las casas es algo nuevo”.

UNA HISTORIA VIOLENTA

El ataque de Villa Progreso sumó otro capítulo a la imparable saga de los quemacoches: la lista de vehículos incendiados durante las madrugadas de la Región sigue creciendo a un ritmo que preocupa, y nadie esta exento de ser el infortunado dueño de uno de ellos.

Hace tres días, lo que ardió fue un taxi Chevrolet Corsa que estaba estacionado en 24, 39 y diagonal 73 de La Loma, a sólo tres cuadras de la comisaría cuarta.

A fines del mes pasado, con horas de diferencias aparecieron tres autos consumidos por el fuego: un Corsa en la zona del arroyo Correa -30 y 665-; un Fiat Uno en 8 bis y 85 de Villa Elvira; y otro en 34 entre 143 y 144 de San Carlos.

Los quemacoches irrumpieron en el escenario local en 2012, pero hasta ahora no se conoce un número de detenciones por estos hechos que esté en sintonía con la cantidad de episodios, si bien días atrás, -y después de que se acumulara casi un centenar de autos quemados en la Región- la Policía detuvo a seis personas, a las que se les incautó combustible y mechas para confeccionar las llamadas bombas molotov.