Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí

Enviar Sugerencia
Conectarse a través de Whatsapp
Temas del día:
Buscar
Opinión |enfoque

El mundo y los que huyen del hambre y de la guerra

El mundo y los que huyen del hambre y de la guerra

El mundo y los que huyen del hambre y de la guerra

10 de Octubre de 2015 | 01:36

ruben sarlo (*)

U na fotografía, una simple muestra más de tanta tragedia en el planeta, nos mostró al chiquito sirio ahogado sobre la playa turca de Bodrum cuando su cadáver era recogido por un guardia local.

El drama lo conocíamos antes de la imagen, pero el impacto fue tan tremendo que parece haber despertado a la humanidad, anunciándole que el mundo va por muy mal camino. Es posible que la imagen -que suele hablar por sí misma- esté anunciando que el drama es muchísimo más cruel de lo que suele creerse. Cientos de miles de personas escapando de los lugares donde las balas y las bombas son moneda corriente.

Las personas huyen ciegamente hacia lugares donde puedan intentar vivir, al menos sin el peligro permanente de morir o ser torturados y mutilados.

El mapa europeo muestra un territorio muy cercano a los frentes de batalla, y allí pretenden llegar de cualquier manera los desahuciados migrantes. No es descabellado entender que en una barcaza precaria donde caben quizás sólo 10 personas, se suban 30 o más y luego naufraguen en el mar con suerte diversa. Ello porque como decimos en éstas latitudes “están jugados”. Si se quedan en la devastación donde han perdido todo, seguramente morirán o tendrán una miserable existencia. El riesgo de morir haciendo el intento de vivir es comprensible.

HIJOS DE INMIGRANTES

El Papa en territorio norteamericano exhortó a terminar con la guerra en el mundo y a que no les tengamos miedo a los extranjeros, recordando que nosotros también somos hijos de inmigrantes. El politólogo norteamericano de origen japonés Francis Fukuyama, publicó en 1992 su obra “El fin de la historia”, ensayo donde afirmó que la historia humana aparece como una lucha entre ideologías que ha concluido, y ha dado inicio a un mundo basado en la política y economía de libre mercado que se ha impuesto a lo que el autor denomina utopías tras el fin de la Guerra Fría.

Al año siguiente el profesor de Ciencias Políticas de la Universidad de Harvard, Peter Huntington, lanzó su tesis sobre el “Choque de las civilizaciones”, trabajo que muchos asociaron a los conceptos de Fukuyama. En síntesis, de ambas obras se extrae una conclusión que venimos viendo cómo se consolida en el mundo actual: los conflictos bélicos internacionales ya no serán ideológicos sino de contenido fundamentalmente cultural y moral, producto de las diferentes civilizaciones. Y obviamente se refieren a las civilizaciones de oriente y occidente, no hay duda sobre ello.

Hoy el planeta asiste a una guerra que amenaza extenderse y que es producto del terrorismo global por parte de fanáticos religiosos del Islam que matan despiadadamente. Utilizan los medios de comunicación visual para mostrarle a la humanidad como destruyen reliquias arquitectónicas milenarias, y cómo asesinan salvajemente prendiéndoles fuego, decapitándolos o ejecutando de un tiro en la cabeza a quienes no se avienen a sus preceptos religiosos y su manera de imponer el estilo de vida, que toman fragmentariamente de una tendenciosa interpretación del libro sagrado islámico “Corán” para justificar sus acciones.

Actualmente en territorio sirio azota el grupo “Isis” y de allí proviene la mayoría de los migrantes que trata de salir desesperadamente de aquellas fronteras, mientras que los atacantes consideran “grave pecado” huir hacia el continente europeo, repudiando a quienes -dicen- arriesgan su vida y las almas de los que deben cuidar (niños, mujeres y ancianos) para ir a lo que consideran “tierra infiel”.

FUNDAMENTALISMOS

Este concepto parece dar la razón a aquellos autores citados, en cuanto a que presenciamos una guerra de tinte religioso, donde se están enfrentando conceptos de corte fundamentalista, modelos de vida y de pensamiento, de diferentes civilizaciones.

Europa está colapsada por la llegada masiva de personas desesperadas y tiene problemas para cumplir con la ayuda humanitaria que han comprometido los países del bloque, pues la Unión estableció un procedimiento sobre “Derecho de asilo” a nivel continental, que muchos de ellos no trasladaron a sus legislaciones internas.

De esa manera, estaría asegurado para quien arriba a estas tierras en dichas condiciones, recibir asilo en el primer país europeo que pisa el refugiado. Sin embargo esto no está sucediendo así, y se abrió una investigación sobre 20 países participantes, porque se sospecha que han enviado a estas personas a países limítrofes directamente (Italia y Grecia) sin registrarlos al paso por sus suelos. Otros en cambio, los han botado porque los consideraron inmigrantes económicos, y en ese caso -no lo son realmente- deberían reunir requisitos que quienes huyen sin nada de la muerte jamás podrán abastacer. Esto sucedió en Hungría y España.

Mientras tanto, se calcula que desde enero llegaron a las fronteras de la Unión Europea unas 500.000 personas, en su mayoría de origen sirio y afgano. Grecia le dio refugio a unos 350.000, Italia a 140.000, España a unos 5.000 y Malta a 800.

Al mismo tiempo en aguas del Mediterráneo murieron ahogados unos 3.000 migrantes y fueron rescatados con vida otros 110.000 en diferentes jurisdicciones marítimas.

Pero este no es todo el drama, porque se calcula que unos 8.000.000 de personas son “desplazados internos” dentro del territorio sirio sin haber podido aún salir del mismo, y otros 4.000 se han refugiado en Turquía, El Líbano y Jordania. Para tener una idea clara de la situación que se vive podemos decir que la isla griega de Lesbos, que tiene una población estable de alrededor de 86.000 personas, tiene el récord proporcional de migrantes ingresados, unos 22.500.

La desesperación por un lado y el pretendido control de los países europeos para contener esta realidad, pone en tela de juicio los discursos sobre derechos humanos sostenidos por sus gobernantes. Y todos los acontecimientos y situaciones concomitantes resultan ser producto de aquella guerra que no se detiene.

¿Qué harán las potencias mundiales al respecto? Pues Rusia e Irán apoyan el actual régimen de gobierno sirio, mientras que EE UU no desea combatir al régimen de Bashar al-Asad temiendo que si aquél es derrotado sin un acuerdo político, los grupos extremistas tomen Damasco y otras capitales, y haya desplazamiento masivo de etnias hacia El Líbano, se genere mayor inseguridad sobre los territorios de Israel y se provoque inestabilidad en Jordania.

Quizás la visita de Francisco y su prédica, hayan movilizado a EE UU y sus aliados a tomar medidas definitivas para que los grupos fundamentalistas no sigan ganando terreno y causando una guerra que nadie sabe dónde puede continuar. Así es como está nuestro pobre mundo.

(*) Fiscal de Juicios de La Plata

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE

+ Comentarios

Para comentar suscribite haciendo click aquí

ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES

HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS

Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales

¿Ya tiene suscripción? Ingresar

Básico Promocional

$120/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $2250

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Suscribirme

Full Promocional

$160/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $3450

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Acceso a la versión PDF

Beneficios Club El Día

Suscribirme
Ir al Inicio
cargando...
Básico Promocional
Acceso ilimitado a www.eldia.com
$120.-

POR MES*

*Costo por 3 meses. Luego $2250.-/mes
Mustang Cloud - CMS para portales de noticias

Para ver nuestro sitio correctamente gire la pantalla