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Cómics: invasión en la televisión

Las historias sobre héroes de las historietas han proliferado en la pantalla chica en el último lustro, paralelo a la explosión del género en cine. ¿Tiene fecha de vencimiento?

Cómics: invasión en la televisión

“The Punisher”, uno de los últimos shows creados por Marvel para Netflix / netflix

11 de Diciembre de 2017 | 04:37
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Cuando la serie “The Punisher” de Marvel debutó en Netflix el mes pasado fue recibida con gran interés y expectativa, pero llegó como una de muchas adaptaciones de libros de historietas. El aluvión comiquero ahora comprende unos 28 programas en nueve canales de señal abierta o cable y servicios de streaming, y el final no está a la vista.

De entrada no todos los programas basados en cómics son creados igual. Los zombies de “The Walking Dead” de AMC son muy diferentes de las aventuras adolescentes de Archie Andrews en “Riverdale” de CW o del gracioso superhéroe de Amazon “The Tick”.

Pero la mayoría existe dentro de dos enormes marcas, algo parecido a Pepsi y Coca-Cola: una es DC, que (con la llegada a mitad de temporada de “Black Lightning” en CW) será representada por nueve programas en tres canales; la otra es Marvel, que tiene 13 programas en seis canales, mayormente en Netflix, que posee media docena.

Eso equivale a más ropa de spandex de lo que se vería en una clase de aeróbics. Pero antes de concluir que los superhéroes se han apropiado de la pantalla chica, vale la pena destacar algunas cosas.

Primero, la televisión siempre ha seguido tendencias. Programas de policías, programas de doctores... Ahora, la tendencia son los cómics, que innegablemente han conquistado las pantallas (también la del cine): como botón de prueba basta ver CW, donde, sin “Smallville” tras una década al aire, no hubo programas de superhéroes en su programación de otoño de 2011, pero tras un aumento anual llegará a siete esta temporada (que, además, una vez por año cruzan sus historias).

En el camino, las películas relacionadas con los libros de historietas se proliferaron y en octubre de 2010 “The Walking Dead” dejó en claro desde su explosivo estreno que los cómics pueden ser todo un éxito en la televisión. Para entonces los gráficos generados por computadora requeridos por cualquier superhéroes se habían vuelto más sofisticados y suficientemente asequibles para las producciones semanales de televisión. Y los programas basados en cómics se convirtieron en el escaparate perfecto para esos impresionantes efectos especiales que no podían aprovecharse en series policiales de drama o series de comedia. Mientras tanto, el lanzamiento de más y más canales, especialmente plataformas de streaming con su capacidad ilimitada de consumo, creaban una necesidad cada vez más grande de crear contenido.

“Ante este extraordinario apetito por material original, las décadas de cómics ofrecían un material que estaba esperando ser usado”, dijo Robert Thompson, director del Centro de Televisión y Cultura Popular de la Universidad de Syracuse. Y aún mejor: tienen un formato perfecto para llevarlos a la televisión: “Un libro de historietas es como un guión gráfico: un diálogo visual en cuadros”, dijo Thompson.

Pero nada de esto explica la sed insaciable con la que el público recibe estos programas. “Todo esto, hasta cierto punto, es escapismo”, explica el experto Brett Rogers, profesor en la Universidad de Puget Sound. “Si estoy viendo ‘Jessica Jones’ por una hora, no estoy lidiando con algo real en mi vida. Pero la otra cara de la moneda es que los programas inspirados en cómics pueden ser espacios para plantear algunas preguntas serias: ‘Jessica Jones’ es una oportunidad para explorar la violencia sexual y el estrés postraumático”.

“La industria de los cómics ha tenido que luchar contra el estigma de ser solo para niños e idiotas”, agregó Rogers. Pero al surgir “niños e idiotas” talentosos como Joss Whedon y Kevin Smith, que llevaron el espíritu de los cómics a medios como la televisión, los libros de historietas adquirieron mayor peso, respeto y urgencia.

“Ahora se ha normalizado como un mito de la cultura masiva”, dijo Rogers. “Es un mito común compartido entre los lectores y los espectadores, entre adolescentes y adultos, los aficionados a los cómics y al cine por igual, no solo la cultura de los chicos”.

¿Cuánto podrá durar esta fiebre? Por más de medio siglo, las tendencias en la televisión han explotado y después se han extinguido y dadas por muertas. Pero la televisión inspirada en los cómics podría no seguir ese ciclo. “Podría menguar como la marea”, dijo Thompson, “pero no creo que haya motivos para creer que este género se extinguirá como otros lo han hecho o que los espectadores se cansarán, pues es un género muy versátil con capacidad para crecer. El género de los cómics sigue madurando, todavía lo estamos viendo evolucionar”.

 

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melissa benoist

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