Un peritaje no descartó el “homicidio” en la muerte del menor con Síndrome de Down

La caída duró un segundo y medio o a lo sumo dos. Y fue desde varios metros de altura, un séptimo piso, por lo que el golpe resultó mortal. La víctima, con Síndrome de Down, tenía siete años cuando, el 10 de octubre pasado, lo encontraron sin vida en el estacionamiento interno de un edificio de 9 entre 55 y 56. El hecho, que provocó gran conmoción en la Ciudad, planteó un escenario con dos hipótesis bien contrapuestas: una apuntaba al accidente y la otra al accionar deliberado de un tercero. El fiscal de la causa es Marcelo Romero, quien pidió una reconstrucción para saber la opinión de los expertos de la División Casos Especiales y Secuencias Fácticas de la Superintendencia de Policía Científica. Y los peritos acaban de presentar sus conclusiones en la causa, que no excluye la pista del “homicidio”.

De acuerdo a ese informe oficial, “no podría descartarse la participación de un tercero como desencadenante de los sucesos”.

“Que de las experiencias realizadas y en función de los resultados obtenidos, no puede descartarse la posibilidad de que la víctima, al momento de su caída, tuviera sujetadas una o ambas manos”, agregó.

Y también aportó datos trascendentes: “La posición en que se encontraban el andador infantil y el ventilador, hacen inferir que no facilitarían la acción de escalamiento”.

“Para que el charco hemático quede situado en el lugar del piso del estacionamiento, necesariamente el cuerpo que la generó debió tener una velocidad inicial, producto de un impulso, del que no puede establecerse fehacientemente, su etiología”, destacó.

Es más doloroso tener esta confirmación. Todavía no entiendo cómo pudo hacer una cosa así” ÁNGELA DONATO mamá de la víctima

“Del análisis de las fotografías tomadas desde el estacionamiento hacia la ventana de séptimo piso, no se observa ningún elemento que sobresalga del plano de la pared, más precisamente de las líneas de caída desde la ventana hacia el estacionamiento, que podrían generar un cambio de trayectoria al momento de la caída”, indicó.

Por su parte, indicó que “el aposentamiento de las partículas de polvo de manera homogénea sobre el turbo ventilador nos hacen inferir que, posiblemente, el menor no tuvo contacto con el mismo”.

Sí encontraron rastros papilares en la ventana, que acreditan que el menor tuvo contacto con la misma.

A todo esto, a la luz de las conclusiones periciales, el fiscal Romero podría efectuar algún tipo de requerimiento que agrave la situación del padre de la víctima y, también la de su actual pareja, ya que estaría acreditado en el expediente que ambos mayores eran quienes se encontraban junto al pequeño al momento del incidente.

El padre, cabe destacar, ya había presentado un pedido de eximición de prisión, que no tuvo tramitación alguna, “por prematuro”, aclararon los voceros consultados por EL DIA.

Distinta sería la circunstancia ahora plasmada como documento en la investigación, que podría impulsar nuevos planteos.

La causa inicialmente se caratuló como “averiguación de causales de muerte”, aunque, a la luz de los últimos acontecimientos, a la brevedad podría tener al menos un cambio de calificación legal, el cual, de confirmarse, también implicaría la adopción de medidas que podrían afectar a los ahora sospechosos.

MOVILIZADA POR EL DOLOR

Ayer, al cumplirse dos meses del terrible episodio, la mamá del pequeño fallecido encabezó una nueva movilización en reclamo de justicia.

Impulsada por un dolor visceral y con las sospechas en que la muerte de su hijo no fue un accidente, volvió a pedir que la Justicia actúe hacia para el esclarecimiento definitivo del caso.

Se trata de Ángela Donato, quien colgó en su página de Facebook “detención de los asesinos”.

La manifestación tuvo lugar en la puerta de tribunales penales, donde también acudió un importante grupo de familiares, amigos y allegados.

“Fui a pedir la detención, porque a dos meses, siguen en plena libertad”, mencionó en diálogo con EL DIA.

“Alguien lo tiró. Las sospechas se confirmaron. Al nene lo mataron. Y es más doloroso tener esta confirmación. Todavía no entiendo cómo pudo hacer una cosa así”, agregó.

“He sido paciente con todos los peritajes. Pero conociendo cómo era y la violencia que ejercía -en alusión al acusado-, siempre supe que había sido él”, aclaró.

EL CASO

Según informó aquella noche la Policía, la víctima estaba jugando en una habitación de su departamento, que da a un patio interno, cuando cayó al vacío.

Si bien, en medio de una creciente desesperación, lo llevaron de urgencia al hospital de Niños, al llegar a ese centro asistencial los médicos confirmaron que ya nada podía hacerse. Estaba fallecido.