Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí

Enviar Sugerencia
Conectarse a través de Whatsapp
Temas del día:
Buscar
Policiales |Impresiones

¿Hay un plan para arruinar el espacio comercial del centro de la ciudad?

5 de Diciembre de 2017 | 02:28
Edición impresa

La situación que viven los comerciantes del centro comercial de calle 8 y sus alrededores es desesperante. A los ataques ya habituales de la "banda de los nenes" se le suman otras problemáticas que preocupan: la creciente instalación de puestos ambulantes, el flagelo de los "trapitos" y los diarios piquetes que transforman las calles del corazón de la ciudad en un verdadero caos. ¿Por qué nadie hace nada? Es evidente que este punto neurálgico platense fue abandonado por las autoridades y se sumerge en una decadencia causada por problemas que podrían ser resueltos. Frente a la inseguridad, la venta ilegal y el "control" callejero por parte de los cuidacoches, los encargados de enfrentar estas situaciones parecen indiferentes.

Ayer el grupo de los chicos, que no superaban los 12 años, volvió a dar varios golpes. Esta vez el blanco fue la zona de Tribunales, donde atacaron con violencia. Tal es el caso de un local de comidas de 48 entre 11 y 12, el cual fue apedreado por esta banda que tiene en vilo a los comerciantes. Antes quisieron meterse en una inmobiliaria y en un negocio de estética.

Atrás quedaron esos días donde las calles céntricas eran espacio de paseo. Hoy parece haber un plan para dinamitar una zona que fue tan importante social y comercialmente.

El centro de la Ciudad ha sido abandonado por las autoridades y se sumerge en una decadencia causada por problemas que podrían ser resueltos. Todo recuento debe comenzar por la inseguridad; los comerciantes están azotados por bandas de delincuentes casi infantiles o preadolescentes que hasta algunos tienen nombres propios que los identifican, como el caso de “Los Pirañitas”. La policía suele argumentar que “entran por una puerta y salen por la otra” cuando se los detiene, si es que se los detiene. También se registran hechos protagonizados por “mecheros” generalmente ejecutando robos “hormiga”. A veces, cuando los comerciantes los identifican y persiguen, ha ocurrido que se acerquen policías y haciendo de jueces llegan hasta decidir que devuelvan aunque sea parte de la mercadería que hurtaron y los dejan irse.

La sucesión de hechos promueve una actitud de ni siquiera efectuar denuncias y tomar el faltante por los robos como parte de los costos. La impunidad ha motivado que comiencen hasta los hechos de violencia, como por ejemplo el apedreo de un comercio ayer en la calle 48 entre 11 y 12.

Otro capítulo lo marca la invasión de vendedores ambulantes. Se ofrece toda clase de mercaderías, y hasta es evidente el apoyo logístico de las bandas de mafiosos que llegan al extremo de distribuir con una camioneta la mercadería en grandes bolsos azules a muchos de los vendedores. En realidad son puestos fijos no ambulantes y alguna autoridad clandestina evita las discusiones sobre quién debe instalarse en cada lugar. En las pocas oportunidades que se intentó retirarlos de las veredas algunos transeúntes han reaccionado en defensa de ese último eslabón de una cadena delictiva cada vez más poderosa. Los negocios instalados en las veredas son la expresión en general del contrabando, el trabajo esclavo, la evasión impositiva y la explotación de extranjeros elegidos para generar lástima y solidaridad aún cuando resisten con demasiada energía al accionar de los agentes del orden, de los inspectores municipales y de cualquiera que quiera investigar las mafias que manejan esa actividad.

Los encargados de enfrentar esas situaciones parecen absolutamente indiferentes a estas circunstancias que conducen a la decadencia del centro de la Ciudad por la invasión de los espacios públicos en plazas y las veredas de las principales arterias comerciales. El descontrol es absoluto, aunque con los menores, por ejemplo, la repetición de detenciones puede generar la pérdida de la patria potestad de los padres y que el Estado se haga cargo de esos niños y adolescentes. Es cierto que los institutos están muy lejos de ser una panacea pero la violencia de los menores está conduciendo a situaciones límites con peligro físico para víctimas y victimarios. Otro tanto con la venta ilegal. En la Ciudad de Buenos Aires se ha adoptado una política respecto a ellos y lentamente se va superando el problema.

En La Plata hasta acaba de ocurrir que aparentemente la Municipalidad autorizó a romper la vereda a una cuadrilla con personal de Berazategui y hacer una zanja en la calle 47 entre 7 y 8 para que una empresa privada tendiera un cable el sábado pasado a la mañana incomodando groseramente el ingreso a los locales en uno de los días de gran importancia desde el punto de vista de las ventas de los alicaídos comercios. El lunes la vereda no estaba siendo reparada y se había arrojado arena sobre los lugares donde se excavó de manera que el viento contribuía a generar molestias y suciedad. ¿Hacía falta realizar esa tarea un sábado? ¿No se podría esperar a enero cuando hay menos transeúntes? Mientras tanto se van sumando pordioseros que también ocupan la vereda, algunos con problemas psiquiátricos como la mujer que entró a un negocio de ropa con buena parte del traste al descubierto y pidió un corte de pelo y reaccionó con brusquedad cuando le dijeron que no tenían tijeras.

LEA TAMBIÉN: La “banda de los nenes” intentó cometer tres asaltos y atacó a pedradas a un local de comidas

¿Y los “trapitos” y piquetes?

Otro rubro que debe tenerse en cuenta es el de los “trapitos”, que fuerza a los automovilistas a pagar una presunta “tasa” de seguridad, además de la tasa municipal por el estacionamiento medido.

Por supuesto es imposible no mencionar los crónicos “cortes” de tránsito por a veces pequeños grupos que, sólo con algunos integrantes parándose en la calle, logran impedir el tránsito vehicular y generan inconvenientes en la zona céntrica. Es cierto que a veces se trata de un conjunto de personas más numerosas organizado públicamente por entidades con personería jurídica que deberían rendir cuentas por impedir la libertad de circulación.

La sumatoria de todos esos hechos parece parte de un plan para dinamitar el centro de la Ciudad, que fue tan importante social y comercialmente.

Puede ser dudoso que un plan exista pero tampoco se conoce ningún proyecto para recuperar arterias por las que se paseaba y se convertían en centros de compras atractivos. En estos días todo está permitido y sólo se ponen dificultades al desarrollo de actividades legales y a pacíficos transeúntes.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE a esta promo especial
Multimedia
+ Comentarios

Para comentar suscribite haciendo click aquí

ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES

HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS

Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales

¿Ya tiene suscripción? Ingresar

Full Promocional mensual

$650/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $6100

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Acceso a la versión PDF

Beneficios Club El Día

Suscribirme

Básico Promocional mensual

$500/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $3950

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Suscribirme
Ver todos los planes Ir al Inicio
cargando...
Básico Promocional mensual
Acceso ilimitado a www.eldia.com
$500.-

POR MES*

*Costo por 3 meses. Luego $3950.-/mes
Mustang Cloud - CMS para portales de noticias

Para ver nuestro sitio correctamente gire la pantalla