Sorpresivos controles a pasajeros de colectivos desatan una controversia

En los últimos días, la realización de operativos policiales en el transporte público sorprendió a los pasajeros de la Región y provocó una polémica entre los que están a favor de la iniciativa porque creen que puede ayudar a contrarrestar el delito en la vía pública y los que se oponen porque les recuerda épocas en las que las “razzias” constituían un avance contra los derechos individuales.

Planteada la controversia, desde el ministerio de Seguridad de la Provincia sostuvieron que los operativos en los que se pide alguna identificación son “una medida preventiva” y que no se realizaron detenciones por carecer de la documentación requerida -sí hubo por portación de arma o de drogas (ver aparte). El propio titular de esa cartera, Cristian Ritondo, aseguró que los controles seguirán hasta que se instalen las cámaras de seguridad en los micros, compromiso asumido con los choferes por la seguidilla de asaltos.

Como se recordará, en las últimas semanas se registraron distintos hechos de inseguridad que afectaron a choferes del Conurbano -incluso uno fue asesinado a balazos-, por lo se comunicó que los procedimientos se instrumentan como una manera de prevenir el delito. Se realizan desde el atardecer en distintos puntos de La Plata, Berisso, Ensenada y Quilmes. Participan tanto agentes de la Bonaerense como de la Policía Local. En un operativo que se hizo, por caso, el pasado fin de semana en 7 y 50, en horas de la madrugada, los agentes revisaron 30 unidades, según información oficial.

CONFUSION entre pasajeros

Vanesa fue una de las personas que presenció un operativo en Villa Elisa: “En la estación de trenes subimos al micro que hace el transbordo a La Plata, pero la policía hizo bajar a la mitad de los pasajeros para pedirles identificación y que mostraran sus pertenencias”.

La pasajera contó que si bien la policía “fue amable” y les anticipó que demorarían unos 15 minutos, algunas de las personas que estaban en el micro discutieron acerca de si la policía tenía o no la facultad de revisarlos.

“La mayoría somos laburantes o estudiantes y la discusión se desató entre los que les parece una buena idea la intervención policial y los que sostienen que no tienen derecho a revisarte las cosas o pedirte documento”, dijo Vanesa.

Días atrás, luego del crimen de un chofer de colectivo en Claypole, el titular de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Roberto Fernández, aseguró que la situación que se vive por la delincuencia es “peor que una guerra”, por lo que salieron a reclamar medidas de seguridad con una protesta que se replicó en La Plata.

Con todo, las inesperadas requisas masivas que se llevan a cabo desde la semana pasada en los micros generaron gran revuelo y discusiones. Muchos pasajeros cuestionaron que se los obligara a bajar de las unidades y se les revisara las pertenencias.

El malestar también llegó a las redes sociales donde se compartieron imágenes en las que se observa como se palpaba a determinadas personas para ver si portaban armas o cómo se les revisaban bolsos y mochilas. En ese contexto, muchos recordaron las “razzias”.

Además causó sorpresa la cantidad de policías afectados a esa tarea y hasta hubo usuarios que lo relacionaron con una “movida de impacto” para llevar tranquilidad a la población frente a los hechos de delictivos.

En ese contexto, fuentes policiales confirmaron que los operativos se están haciendo desde el viernes pasado, pero se aclaró que no se produjeron detenciones por no contar con identificación.

Sin embargo, se descartó que se tratara de “razzias” y se reforzó la idea de que se actúa por pedido de los sindicatos del transporte para prevenir cualquier hecho delictivo en los micros.

En ese marco, se comunicó que se buscan armas, sustancias tóxicas o cualquier elemento prohibido que pueda derivar en episodios de violencia y afectar la seguridad de los choferes y de los pasajeros.

En la región los operativos se realizan al anochecer en La Plata, Berisso y Ensenada, en once puntos que son rotativos y en distintos horarios. Hasta el momento se hicieron controles en calle 4 entre 44 y 45, en diagonal entre 115 y 116 y en 1 y 53.

Por otro lado, las autoridades provinciales aclararon que cuando la persona no tiene consigo el DNI se le solicita cualquier otra constancia que pueda acreditar la identidad como puede ser un carnet de conducir o de alguna obra social.

¿ACTO ABUSIVO?

El abogado José María Martocci, director de la Comisión de Derechos Humanos del Programa Clínicas Jurídicas de la facultad de Derecho de la UNLP calificó como “irrazonable” palpar a los pasajeros si no hay una situación irregular que lo justifique.

“Se puede pedir identificación, pero para hacer una requisa se tiene que estar frente a una situación irregular como, por ejemplo, un posible hecho delictivo”, sostuvo el abogado quien opinó que de lo contrario se puede caer en un acto abusivo.

Si bien Martocci evaluó que la policía suele tener una mirada selectiva sobre a quién pedirle documentos y a quién no, dijo que se corre el riesgo de que se avance sobre la intimidad de las personas.

“Viajar sin causar escándalo o situación anormal no debe dar motivo a ningún tipo de averiguación. Si no hay una situación pre delictual, avanzar sobre la intimidad de las personas es excesivo”, afirmó y agregó que la gente puede negarse legítimamente a que se lo palpe o revise porque eso es “irregular y diría inconstitucional”. El abogado consignó que los operativos pueden incurrir en la violación del artículo 19 de la Constitución Nacional.

No obstante, el abogado contempló que hay ocasiones excepcionales en las que las facultades de la policía se incrementan, como por ejemplo, cuando se revisa micros en los que viajan simpatizantes de clubes de fútbol y se sospecha que lleven armas o pirotecnia.

“No conozco ninguna norma que obligue a portar el documento en situación normal, salvo que se esté en estado de sitio o conmoción pública, en esos casos está previsto que los poderes del estado se incrementen sobre la vida personal”, dijo Martucci y opinó con relación a los operativos en el transporte público que “no se busca de esa manera, es una excusa para intervenir en la vida de la gente”.

Por su parte, diálogo con EL DIA el Defensor del Pueblo provincial, Guido Lorenzino aseguró que “el fin no justifica los medios, no se pueden llevar adelante procedimientos riesgosos y buscar posibles delincuentes de cualquier manera”. En esa línea, el defensor indicó que sería muy diferente si los mismos operativos se hicieran con la presencia de gente del poder judicial.

“Si hubiera fiscales estaría garantizada la no violación de los derechos individuales, pero dejar todo en manos de las fuerzas de seguridad no me parece lo adecuado. No se puede llegar al control de un problema de cualquier manera”, concluyó Lorenzino.