VIDEO.- Señales peligrosas y salvajes en La Plata: seis enfrentamientos armados en 10 días

Dispuestos “a matar o morir”. Ese es el código del hampa que pulula por nuestra ciudad, donde, en solo 10 días, mantuvo seis enfrentamientos armados con la Policía.

Sin considerar que esos datos puedan marcar una tendencia estadística, sí representan señales muy peligrosas en medio de los crecientes reclamos vecinales -y de grupos de comerciantes- por mayor seguridad en distintos puntos del partido.

Ayer a la madrugada, cerca de la una, una persecución a balazos en Villa Elvira terminó con un delincuente abatido.

Se trata de un joven de 20 años, que recibió siete impactos en distintas partes del cuerpo.

Así, malherido, lo llevaron a un hospital, donde finalmente perdió la vida.

Por el caso, un patrullero terminó severamente dañado por una maniobra “estilo kamikaze” por parte de los ladrones, que escapaban en un auto y se inmolaron al embestir el móvil de frente.

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El resultado, ambos rodados destrozados, el joven malviviente con disparos por todos lados y su cómplice, de 36 años, preso.

Ese bestial escenario se representó en la intersección de las calles 7 y 98 y generó una gran conmoción dentro del barrio.

“Esta zona no es segura. Estamos cada vez peor”, contó Élida, que tiene un negocio en la zona.

“A mi me han asaltado a la madrugada. Me robaron a la vuelta de mi casa. Es un barrio inseguro, absolutamente. Por más que pongas rejas o alarma, igual te roban”, relató la mujer.

Otra tremenda balacera en La Plata

Más temprano, otro vecino declaró que “hubo una balacera tremenda” y que más allá de que escuchó los disparos salió de su casa “recién cuando llegó la Policía Científica”.

Todo empezó cuando vieron a uno de los delincuentes salir, arma en mano, de una finca de 115 y 96. Por eso alguien llamó al 911 y precipitó el operativo.

Según una versión, se trataría parte de la banda que entró con un ariete a una finca en Olmos y le pegó un tiro en una rodilla a la hija del dueño.

“La vida es una hija de p... hermano. Siempre vas a estar conmigo. Te amo mucho mi rey. Siempre, siempre conmigo manito. Te llevaste mi corazón hermano. Cómo hago ahora. Contame como m..... hace mami. Dios no existe. La vida no es justa. Hdp. Los odio policías”, despidió la hermana del asaltante fallecido en las redes sociales.

Seguidilla violenta y salvaje

Un día antes, el 28 de junio, un vecino vio pasar el coche que le habían robado con dos personas adentro. Y no dudó en dar aviso a la Policía, que salió a cruzar ese vehículo.

En esas circunstancias, al llegar a 46 y 153, en El Retiro, los delincuentes detuvieron la marcha y arrancaron los disparos, que no evitó su captura. Todo lo contrario. Es más, uno de ellos cayó herido de bala en el omóplato derecho.

Según voceros del caso, se trataría de los mismos actores que balearon a un quintero en 32 y 216, a quien le dieron un tiro en el tórax.

Por esa agresión, al trabajador tuvieron que operarlo y actualmente se mantiene estable.

El 26 de junio, en tanto, se conoció la historia de “Tiro Loco”, un delincuente “a la vieja usanza”, con antecedentes pesados y que se tiroteó con varios efectivos con dos armas. Una en cada mano.

De todas formas, no salió vivo de la balacera y el caso generó gran conmoción entre los vecinos. Algunos que lo idolatraban y otros, la mayoría, que le tenían terror.

El 23 de junio, dos delincuentes se metieron a robar en una vivienda de City Bell, donde amedrentaron a sus víctimas y le robaron el auto, donde cargaron el botín.

Alertados del hecho, los móviles del Comando saturaron ese cuadrante y, los demás linderos, por lo que en la colectora que existe en cercanías del cruce de las rutas 2 y 36 empezaron los tiros.

Los ladrones, al ver que la situación que les había puesto adversa, se arrojaron del automóvil y uno de ellos, con un impacto en la zona inguinal, resultó aprehendido.

El 22 de junio, por si fuera poco, se desencadenó un nuevo enfrentamiento con los ocupantes de un Chevrolet Prisma, que en su afán de huir a toda velocidad chocaron contra una luminaria.

Igualmente, pese a los golpes por la fuerte colisión, pudieron salir del habitáculo y seguir la fuga a pie hasta perderse sin ser vistos.

Por último, el 19 de junio entre cuatro y cinco sujetos, dos de ellos armados, ingresaron en un domicilio de 8 entre 477 y 478 del barrio Savoia. Pero como no logran robar, huyeron en un Fox blanco.

Un rato después, los avistaron por Tolosa y arrancó una persecución a tiros hasta 2 y 520 (hablan de 10 detonaciones), donde también colisionaron contra un poste de alumbrado y quisieron escapar a la carrera. Pero 4 jóvenes fueron detenidos.