Salud: los cuidados, desde prevenir la desinformación hasta los nuevos dilemas

En el Día Mundial de la Salud, aparecen un cúmulo de preocupaciones sobre los nuevos dilemas que atraviesan al sector en la Ciudad y la Región. Siendo un rubro afectado por la crisis socioeconómica que afronta el país, en esta jornada de reflexión se desanda el recorrido de los últimos cuatro años, desde la pandemia hasta hoy. Con enseñanzas y puntos que siguen en el debe, los profesionales presentan batalla diaria para cuidar a los pacientes.

En pleno brote del dengue, este oficio infravalorado -a pesar de sus hitos en la historia de la humanidad- vuelve a estar en consideración, mientras las condiciones de atención empeoran. A pesar de esto, hacia adelante, se presentan una serie de desafíos para quienes se dedican en el ramo de la salud.

Con la creciente disponibilidad de información médica, crecen las preocupaciones de los profesionales sobre cómo puede un paciente distinguir entre fuentes confiables y no confiables. A su vez, se presentan inquietudes sobre el papel deben desempeñar los profesionales de la salud en la educación del público sobre la búsqueda de información médica precisa en Internet. En ese mismo sentido, con el creciente uso de tecnologías digitales y redes sociales, la salud de la población pudo haber tenido afecciones.

En otro orden, a medida que avanzamos hacia una era de medicina más personalizada o, incluso, hacia la robotización de la atención e intervención (prospectivamente), existen interrogantes sobre los principales dilemas ético-profesionales que enfrenta el sector.

Asimismo, surgen cuestiones como cuáles son los principales riesgos para la salud que se enfrenta la población como resultado de los cambios ambientales, dentro de lo que se circunscribe la proliferación del dengue (como ya ha publicado este diario). También preocupan la situación de los cuidados de la salud que fueron incorporados por la población tras la pandemia y cuáles resta por asimilar. Además, persisten los signos de pregunta sobre cuáles son los cuidados de la salud más desatendidos.

PROBLEMÁTICAS

El Día Mundial de la Salud es una jornada conmemorativa que se celebra el 7 de abril desde 1950. Cuatro años antes, fue establecida por 61 miembros de las Naciones Unidas.

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Los desafíos en el ámbito de la salud se han intensificado en la era digital. La propagación de información falsa y engañosa en internet está en constante evolución, dificultando aún más la capacidad del ciudadano común para discernir entre lo verdadero y lo falso. La desinformación médica no solo es un problema de libertad de expresión, como lo evidencian los recientes debates judiciales, sino que también plantea riesgos reales para la salud pública.

En un contexto donde la información cambia vertiginosamente, discernir entre lo científicamente respaldado y lo ficticio es una tarea cada vez más ardua. Las redes sociales y los avances en inteligencia artificial han amplificado la rapidez y la difusión de afirmaciones sin fundamentos, erosionando la confianza en los expertos y las instituciones de salud pública.

Los efectos de esta desinformación no se limitan a la esfera de lo que fue la pandemia del Covid. A la par, se ve cómo la confianza en las vacunas contra otras enfermedades, como el sarampión, se ve socavada por teorías conspirativas y afirmaciones infundadas. En ese punto, según NY Times, Tara Kirk Sell, investigadora principal del Centro Johns Hopkins para la Seguridad Sanitaria, subrayó que la sociedad está inmersa en un bucle de retroalimentación donde la pérdida de confianza y la desinformación se refuerzan mutuamente.

¿Cómo podemos discernir la desinformación en el vasto mar de información en línea? Los expertos brindan consejos cruciales para navegar este panorama incierto.

El Dr. Anish Agarwal advierte sobre las soluciones rápidas y sin fundamentos que inundan la web. Él insta a verificar la información con fuentes confiables, como médicos y organismos de salud pública.

Tara Kirk Sell aconseja mantenerse alerta ante las afirmaciones en línea que apelan a nuestras emociones o intentan generar inquietud. ¿El mensaje parece diseñado para engancharnos o inquietarnos? ¿La fuente corrige sus errores?

Sander van der Linden puntualizó sobre los “falsos expertos”, personas que carecen de credenciales médicas pero difunden información médica sin fundamento. Es esencial validar las credenciales de aquellos que afirman ser expertos en salud.

Existen interrogantes sobre la mediación de la inteligencia artificial

La desinformación a menudo emplea un lenguaje polarizador y recurre a imágenes diseñadas para provocar inquietud. Irving Washington propone validar las afirmaciones con fuentes confiables y a buscar la fuente original de la información siempre que sea posible.

Al encontrarse con alguien que repite información falsa o engañosa, es crucial abordar la situación con empatía. Utilizar frases como “lo entiendo” y “es difícil saber en quién confiar” puede abrir un diálogo constructivo.

El Dr. Anish Agarwal sugiere hacer preguntas para fomentar la reflexión crítica en lugar de imponer opiniones. Proporcionar recursos de confianza, como sitios web de salud pública, puede ayudar a contrarrestar la desinformación.

Aunque no siempre se pueda convencer a los demás, cada conversación es una oportunidad para sembrar semillas de duda sobre la información falsa. Mantener un enfoque empático y basado en la evidencia es fundamental para combatir la desinformación en nuestros círculos cercanos.

En un mundo saturado de información, la habilidad para discernir la verdad de la falsedad se ha vuelto más crítica que nunca. Equipados con conocimientos sólidos y una actitud empática, se puede desafiar la desinformación y promover la salud y el bienestar en nuestra comunidad.

HACIA EL FUTURO

La intersección entre la tecnología y la medicina ha generado una revolución silenciosa pero significativa en la forma en que se brinda atención médica. En este contexto, la robótica médica emerge como una fuerza transformadora, mejorando tanto la calidad como la eficiencia de los servicios sanitarios. Uno de los aspectos más notables de esta revolución es su capacidad para mejorar directamente la atención al paciente.

Los robots médicos están desempeñando un papel cada vez más crucial en diversos aspectos de la atención médica. Desde procedimientos mínimamente invasivos hasta terapias personalizadas, estos dispositivos tecnológicos están marcando la pauta para una nueva era en la medicina. Uno de los mayores beneficios radica en su capacidad para automatizar tareas rutinarias, liberando así a los profesionales de la salud para que se centren en brindar atención directa y personalizada a los pacientes.

Con la creciente disponibilidad de información médica, crecen las preocupaciones

Los flujos de trabajo clínicos también se han optimizado gracias a la introducción de robots móviles autónomos (AMR). Estos dispositivos simplifican las tareas diarias, reducen la carga física sobre el personal humano y garantizan una mayor consistencia en los procesos. Esta optimización no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también aborda preocupaciones sobre la escasez de personal y garantiza que los recursos necesarios estén disponibles donde se necesiten.

En términos de seguridad en el lugar de trabajo, la robótica médica también ha marcado un hito significativo. Los robots pueden realizar tareas como limpiar y preparar habitaciones de pacientes de manera independiente, reduciendo así el contacto interpersonal en áreas donde las enfermedades infecciosas son una preocupación. Además, con el respaldo de la inteligencia artificial, el proceso de identificación y distribución de medicamentos se ha vuelto más eficiente, lo que contribuye a una atención más segura y precisa.

Un área en la que los avances en robótica médica son particularmente visibles es en el ámbito de la cirugía. Los robots de asistencia quirúrgica están permitiendo a los cirujanos alcanzar niveles sin precedentes de velocidad y precisión en procedimientos complejos. Equipados con tecnologías de inteligencia artificial y visión por computadora, estos dispositivos pueden diferenciar entre diferentes tipos de tejido y evitar daños a nervios y músculos durante las operaciones.

Los profesionales de la salud, asediados por la crisis / Pexels

Mirando hacia el futuro, se espera que la robótica médica continúe evolucionando a medida que avancen las tecnologías relacionadas con el aprendizaje automático, el análisis de datos y la visión por computadora. Esto abrirá nuevas posibilidades para la autonomía y la precisión de los robots en la atención médica, permitiendo que los profesionales de la salud se enfoquen aún más en brindar atención personalizada y directa a los pacientes.

En colaboración con investigadores y proveedores de tecnología, empresas como Intel están liderando el camino en la exploración de la próxima generación de soluciones robóticas en medicina. A través de su apoyo tecnológico e investigativo, Intel está impulsando el descubrimiento de nuevas aplicaciones de inteligencia artificial e Internet de las cosas (IoT) en el campo de la robótica médica. Estas contribuciones son fundamentales para impulsar innovaciones continuas que aumenten la automatización, mejoren la eficiencia y aborden los desafíos más importantes en la atención médica.