Renée Zellweger, una cara nueva con un gran futuro por delante

Hace cuatro años, Renée Zellweger era una de las tantas jóvenes actrices que se trasladan sin pausa entre una y otra audición en Hollywood. Sin embargo, el film "Jerry Maguire" cambió su suerte y ahora se prepara para el estreno de su último proyecto "Me, Myself an Irene", junto a Jim Carrey.
Dirigida por los hermanos Bobby y Peter Parrelly (creadores de "Algo con Mary"), la comedia trata sobre un soldado (Carrey) con multiples personalidades y todas ellas se enamoran de una sola mujer, Irene (Zellweger).
"Me Myself and Irene", la cual será estrenada el próximo 23 de junio en Estados Unidos, promete ser un de los grandes éxitos de la temporada.
Asimismo, Zellweger aparecerá próximamente en la versión cinematográfica de la novela de Helen Fielding, "Bridget Jone's Diary". La joven actriz compitió por el papel de la heroína con artistas de la talla de Kate Winslet y Helena Bonham-Carter.
"Bidget Jone's Diary trata sobre la fascinante vida de una joven soltera. Tiene el encanto de la narrativa de Jane Austen, con aspectos irónicos y cómicos al mismo tiempo", comentó Zellweger sobre el libro en el que se basa su último film.
Para el productor Eric Fellner ("Cuatro Bodas y un Funeral"), la decisión no fue difícil: "Renée es una de las mejores actrices de comedia de su generación y le aportó gran convicción al papel. Es la perfecta Bridget".
Zellweger no sólo cuenta con un gran talento, sino también con un rostro hermoso y expresivo que cautiva a la audiencia de inmediato. Esta era una condición esencial para lograr ponerse en la piel de Bridget, según sus creadores.
"Renée es sumamente transparente", comentó Laurecen Mark, coproductor de "Jerry Maguire", el filme que cambió la dirección de la carrera de la actriz y por el cual Tom Cruise fue nominado a un premio Oscar.
"La cámara captura de inmediato su brillo personal. Renée es sumamente abierta en relación a su personalidad tanto frente como detrás de las cámaras. No oculta nada, ni tiene el caracter típico de las estrellas de Hollywood", añadió Mark.
Zellweger, quien cumplió 31 años el pasado mes de abril, es lo más anti-Hollywood que existe en la actualidad. La actriz vive de forma modesta, lleva a su perro a todas partes y guarda una pelota de baloncesto en el baúl de su auto, en el caso de que se cruce con la posibilidad de jugar un partido.
La actriz no oculta su fuerte acento texano y no se desilusiona cuando la gente no la reconoce en público. "A veces uno espera cierta atención, pero últimamente estoy recibiendo más de la que necesito", comentó.
Asimismo, en noviembre, la actriz coprotagonizará junto a Morgan Freeman y Chris Rock el film "Nurse Betty", un film independiente dirigido por Neil LaBute, creador de las películas "In the Company of men" y "Your Friends & Neighbors".
Según las palabras de la actriz, "Nurse Betty" es un filme negro, pero muy divertido. Sobre su personaje, Zellweger dijo: "está un poco loca, ella experimenta una situación traumática y tiene la fantasía de ser una enfermera".
El interrogante de cómo una joven de un pueblo pequeño logró llegar tan lejos y mantenerse en un mundo tan competitivo como el de Hollywood es simple: "Renée tiene las mismas ambiciones que todo el mundo, pero estas se limitan a su vida profesional", según su amigo Dan Ireland, quien la dirigió en "The Whole wide world" en 1996.
Zellweger creció en un pueblo pequeño a 50 kilómetros de Houston, Texas, donde no había ni cine, ni televisión por cable. La actriz y su hermano, Drew, se criaron junto a su padre suizo y su madre noruega, lejos del ruido de las grandes ciudades.
Sin embargo, después de tomar una clase en arte dramático durante sus años de secundaria, Zellweger decidió cambiar su pueblo por el pavimento de Los Angeles. Varios roles pequeños anticiparon su gran salto, cuando Tom Cruise y Laurence Marl la eligieron para actuar en "Jerry Maguire".
"Nos divertimos mucho con Renée. Creo que tiene una naturalidad y espontaneidad que pocas veces se encuentra en una actriz. Es sumamente fresca y ha sabido mantener su espíritu independiente. Es una actriz de instinto", afirmó Laurence.
Desde entonces, Zellweger probó poseer gran versatilidad a la hora de personificar diferentes papeles, como el de una mujer judía en "A price above rubies", una maestra de escuela en "A whole wide world", una prostituta neurótica en "Deceiver" y una periodista que se enfrenta a la enfermedad de su madre en "One true thing".
Según Meryl Streep, protagonista de "One true thing", Zellweger tiene una gran carrera por delante. "Su pasión por actuar con todos sus sentimientos, representaba un reto para mí cada vez que teníamos que trabajar juntas", comentó la actriz nominada al Oscar en doce oportunidades -una de ellas por "One true thing".