Otra movilización albirroja

A través de un "bocinazo" que arrancó en 55 y 1 y finalizó en Plaza Moreno, socios y simpatizantes de Estudiantes volvieron a movilizarse anoche para que la Comuna autorice la obra de remodelación del estadio, tal como la plantea el club.
Como el "banderazo" del pasado martes 2, la movilización fue organizada por las distintas agrupaciones y filiales albirrojas, para respaldar el proyecto de obra al que dio forma la actual CD y que el Municipio ha trabado porque, según se especificó, viola lo establecido por la Ley 6183 de protección del Paseo del Bosque.
Los simpatizantes estudiantiles se reunieron a partir de las 19 en 55 y 1 y, desde allí, en automóviles, fueron por calle 1 hasta 44; después enfilaron hacia Plaza Italia para tomar luego por 7 hasta 48. En ese punto se sumaron a la caravana aquellos que se movilizaban a pie. Finalmente, tras subir por 48, siguieron por diagonal 74 hasta la Plaza Moreno.
Haciendo sonar las bocinas de los vehículos y enarbolando banderas, con el agregado de la explosión de artefactos de pirotecnia, los manifestantes, pasadas las 20.30, comenzaron a circular por los alrededores de la plaza mientras que también un grupo significativo se apostó frente al Palacio Municipal, donde renovaron sus críticas a la Comuna por no autorizar la obra tal como fue proyectada por el club.
La movilización arrancó ayer casi tímidamente, pero con el correr de los minutos fue ganando en ebullición y color. En la misma medida en que se iban agregando más automóviles y gente a pie (muchos menos que en la jornada de protesta anterior) portando banderas, sombrillas y vistiendo la mayoría de ellas la camiseta albirroja, el clima fue "in crescendo", tal como aconteció en la primera movilización que arrancó en la sede social de calle 53 y finalizó también en la Municipalidad, aunque con algunos incidentes lamentables que no se repitieron anoche.
Según estimaciones de los organizadores, este sonoro "bocinazo" reunió a alrededor de 5.000 personas, de los cuales unos 2.000 se manifestaron a pie. Según los cálculos efectuados por la Policía Bonaerense, que le dio el marco de seguridad a esta convocatoria, la cifra rondaría los 500 hinchas a pie y aproximadamente unos 100 vehículos.
Una vez más, los hinchas no escatimaron su aliento vivando al club y exigiendo que se concrete la obra proyectada que, como se sabe, es objetada por la Comuna por su diagrama arquitectónico y su magnitud. Otra vez hubo cánticos en contra del intendente Julio Alak por la decisión de la Comuna de exigir una adecuación de la obra.
El "bocinazo" se prolongó por espacio de casi dos horas.
No se registraron incidentes y la desconcentración se realizó con total normalidad. Esta vez los organizadores estuvieron atentos al desplazamiento de los hinchas pero, muy especialmente, a que no se produjeran desbordes como los que en cierta medida desnaturalizaron el "banderazo" que puso en marcha este reclamo por la remodelación del estadio de 57 y 1.