28 de Agosto de 2003 | 00:00
"El fondo del mar", opera prima de Damián Szifrón, el guionista y director de ese gran éxito televisivo que fue este año "Los simuladores"; "Lara Croft-Tomb Raider - La cuna de la vida", secuela de la exitosa aventura con Angelina Jolie como la intrépida arqueóloga que revisa viejas tumbas; "Básico y letal", con John Travolta y Samuel L. Jackson en género, papeles y ambiente (ahora como un agente de la DEA y un militar en un cuartel tropical y en tono de thriller) distintos del de "Tiempos violentos", y "Magdalene Sisters", un filme de Peter Mullan, ganadora del León de Oro del Festival de Venecia 2002, son los filmes que hoy renuevan la cartelera cinematográfica platense.
"EL FONDO DEL MAR".- Guionista y director de "Los simuladores", ciclo de TV que este año, en su segunda temporada, logró altísimos ratings, Damián Szifron llega ahora a la realización de cine con esta comedia con elementos de thriller, que tiene en sus papeles centrales a Daniel Hendler, Dolores Fonzi y Gustavo Garzón y que ganó en el festival de Mar del Plata los premios a mejor película iberoamericana, del público y de Fipresci a la mejor película iberoamericana.
Szifrón reconoció que hay huellas autobiográficas en lo que definió como "una comedia incómoda" sobre un joven estudiante de arquitectura, aficionado al buceo por su amor hacia las profundidades del mar, quien vive obsesionado por su novia y, a partir de la certeza de una infidelidad, inicia una persecución alocada para descubrir quién es el hombre que le está moviendo el piso.
"LARA CROFT-TOMB RAIDER-LA CUNA DE LA VIDA".- La opulenta Angelina Jolie retoma acá el personaje de Lara Croft, la heroína de jueguitos electrónicos que en 2001 desembarcó en cine -con una muy buena respuesta del público- subrayando su identidad de millonaria, aventurera y arqueóloga que recorre el mundo investigando en arcanas tumbas, enfrentando a variados villanos y valiéndose de su destreza para las artes marciales.
En esta continuación, dirigida por el holandés Jan De Bont ("Máxima velocidad", "Twister"), Lara Croft debe encontrar la Caja de Pandora, que -se dice- contiene la maldad más abominable que se haya conocido y que está oculta en Africa, en una zona conocida como La Cuna de la Vida. Si la chica llega tarde, la caja caerá en manos de un científico maniático, ganador del premio Nobel, quien planea usar el poder maléfico de la caja en su propio beneficio.
"BASICO Y LETAL".- John Travolta y Samuel L. Jackson, a quienes Quentin Tarantino mostró como un excéntrico tandem de asesinos a sueldo en "Tiempos violentos", se reúnen otra vez, pero en roles muy distintos de aquellos, en este thriller de suspenso que dirigió John McTiernan (los dos primeros "Duro de matar", "La caza al Octubre Rojo") y que transcurre durante 12 horas en una base militar estadounidense a orillas del canal de Panamá, azotada por un huracán.
En ese cuartel, en lo que pareció un ejercicio rutinario de entrenamiento, desaparecieron -cuenta el film- un severo sargento (Jackson) y varios de sus reclutas de las Fuerzas Especiales. Para desentrañar el misterio, el jefe de la base apela por izquierda a un ex comando, ahora agente de la DEA (Travolta), quien de movida se lleva mal con la capitana (Connie Nielsen, de "Gladiador"), nombrada oficialmente para encabezar la investigación.
MAGDALENE SISTERS...EN EL NOMBRE DE DIOS".- Esta película está basada en la sorprendente historia de miles de mujeres que fueron rechazadas por sus familias y abandonadas a la misericordia de la Iglesia Católica. Descartadas como "mujeres fáciles", fueron internadas la mayoría de las veces sin haber cometido un crimen, sino por ser pobres, huérfanas, víctimas de violación, madres solteras o consideradas en "peligro mortal".
Los hogares Magdalena fueron establecidos en el siglo XIX en Irlanda y al asomarse el siglo XX fueron apropiados por la Iglesia Católica que estableció un régimen más estricto. Administrado por las Hermanas de la Misericordia, las mujeres fueron obligadas a trabajar a destajo como lavanderas sin ninguna remuneración. Algunos de los 10 hogares existentes en Irlanda fueron cerrados en los años '70 con el auge del comunismo que disminuyó el poder de la Iglesia Católica en las sociedad Irlandesa. En 1996 el último hogar fue cerrado con 40 y 50 mujeres aún residentes incapaces de tolerar la vida fuera de la institución.
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