Rolando Graña probó alucinógeno-ritual en emisión de "Código"
| 24 de Marzo de 2005 | 00:00

El periodista Rolando Graña fue protagonista anoche, durante la emisión del ciclo "Código" (América, de 23.15 a 0.15), de un inédito capítulo de la TV local al ingerir el alucinógeno-ritual amazónico ayahuasca y filmar los efectos de esa prueba, para la producción titulada "El viaje de Rolando".
Como una versión televisiva de las experiencias narradas por Carlos Castañeda en su libro "Las enseñanzas de Don Juan", el también conductor del noticiero nocturno "Informe central" se encontró en una quinta con el chamán Henry Burgado, a quien desde Endemol, productora del envío, presentaron como "doctor en divinidad de la universidad estadounidense de Palm Beach".
Graña bebió la mezcla de ayahuasca que profesores de la Universidad de Rosario utilizan para tratamientos psiquiátricos y de las adicciones, y se internó en un estado que por siete horas lo dejó "soñando pero despierto", según definió en la tarde de ayer durante una entrevista promocional concedida a "Intrusos en el espectáculo", también de América.
Durante "El viaje de Rolando" (crudamente retratado por las cámaras del programa) el otrora integrante de "Punto.doc" padeció los efectos laterales del brebaje (vómitos y diarrea) que son las secuelas que evitan que la ayahuasca genere adicciones.
"Tomarla es repugnante, aunque en un primer momento se saborea como si se tratara de un vino muy grueso", confesó en charla con Jorge Rial y sus panelistas.
Para cerrar su relato en torno al asunto televisado que amaga con generar un debate sobre los alcances del medio y cierta hueca polémica sobre apología de la drogadicción en la pantalla chica, Graña dijo "en el momento sentí como si hubiera estado en un retiro espiritual" y enseguida redondeó: "Prefiero tomar ayahuasca que estar en medio de un tiroteo".
Como una versión televisiva de las experiencias narradas por Carlos Castañeda en su libro "Las enseñanzas de Don Juan", el también conductor del noticiero nocturno "Informe central" se encontró en una quinta con el chamán Henry Burgado, a quien desde Endemol, productora del envío, presentaron como "doctor en divinidad de la universidad estadounidense de Palm Beach".
Graña bebió la mezcla de ayahuasca que profesores de la Universidad de Rosario utilizan para tratamientos psiquiátricos y de las adicciones, y se internó en un estado que por siete horas lo dejó "soñando pero despierto", según definió en la tarde de ayer durante una entrevista promocional concedida a "Intrusos en el espectáculo", también de América.
Durante "El viaje de Rolando" (crudamente retratado por las cámaras del programa) el otrora integrante de "Punto.doc" padeció los efectos laterales del brebaje (vómitos y diarrea) que son las secuelas que evitan que la ayahuasca genere adicciones.
"Tomarla es repugnante, aunque en un primer momento se saborea como si se tratara de un vino muy grueso", confesó en charla con Jorge Rial y sus panelistas.
Para cerrar su relato en torno al asunto televisado que amaga con generar un debate sobre los alcances del medio y cierta hueca polémica sobre apología de la drogadicción en la pantalla chica, Graña dijo "en el momento sentí como si hubiera estado en un retiro espiritual" y enseguida redondeó: "Prefiero tomar ayahuasca que estar en medio de un tiroteo".
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE