Bilos: Al Flaco no le pesó la camiseta

SUWON, Corea del Sur.- Empezó a pagar tanta expectativa. El Flaco Daniel Bilos (8) no perdió tiempo. Después de un año de espera tuvo la oportunidad de calzarse la azul y oro y a pesar de que se trataba de un partido amistoso, dejó su sello con unas cuantas intervenciones. Marcó un gol en un momento complicado del encuentro, que sirvió para llegar al empate, pero además, antes dio un pequeño recital que incluyó un caño, un taco y hasta una habilitación de chilena. No solamente aprobó con creces en su debut, sino que además se convirtió en la figura de Boca y del partido. El técnico Alfio Basile puede descansar tranquilo, ya que le designó dos funciones distintas en el mismo partido -arrancó como volante y buena parte del segundo tiempo lo jugó como delantero- y el Flaco de Pergamino respondió bien en las dos.

Un escaloncito solamente por debajo apareció Marcelo Delgado (7). Como en sus viejos tiempos, el Chelo jugó de punta y cuando apenas se llevaban jugados dos minutos, coronó una gran corrida con un tiro bajo y esquinado, de zurda, que significó el uno a cero. Además, sirvió el pase para que Bilos enhebrara esa hermosa jugada que significó el segundo y definitivo empate. Delgado tuvo siempre el arco entre ceja y ceja y.

Federico Insua (6), otro de los debutantes, cumplió una actuación destacada, aunque su labor fue de mayor a menor. Ya a los cuatro minutos, el Pocho había probado dos veces al arco. La primera, como producto de una buena combinación con Bilos, que terminó con un remate que se fue apenas arriba, y luego combinó con Palacio y obligó al arquero a volar. No mantuvo el mismo nivel en la parte complementaria, hasta que fue reemplazado por Barros Schelotto.

Quien también se puso la camiseta de Boca por primera vez y cumplió en ese intento fue Daniel Díaz (6). Si bien el catamarqueño tuvo algo de responsabilidad en el segundo gol, ya que los ingleses en esa jugada entraron por ese sector, y en una acción llegó a destiempo y cometió una fuerte infracción, mostró la personalidad que de él se esperaba. Un solo partido bastó para comprobar que la camiseta de Boca no le pesó.

El resto cumplió una actuación destacada. Roberto Abbondanzieri (6) no tuvo responsabilidad en los goles; Rolando Schiavi (6) exhibió la solvencia de siempre y además, en el área adversaria, tuvo un par de situaciones. Diego Cagna (6) jugó un buen primer tiempo, mostrándose en dos ocasiones como una buena alternativa en ataque y luego decayó y le costó encontrar su lugar, hasta que fue reemplazado; Fernando Gago (6) mostró su calidad pero con intermitencias, colocando un pase de ensueño en el primer gol.

La otra cara nueva que apareció ayer en Seúl fue la de Guillermo Marino. Si bien se notó la falta de fútbol en el ex Newell’s, en los minutos que jugó mostró bastante dinámica y seguramente se irá asentando con el correr de los partidos. Neri Cardozo cumplió en los minutos que jugó, Guillermo Barros Schelotto calentó el clima el rato que estuvo en la cancha y Pablo Alvarez ingresó sobre el final.

Los de más flojo rendimiento fueron Rodrigo Palacio (5), quien por ahora sigue estando lejos del nivel que supo mostrar hasta no hace mucho tiempo; José María Calvo (5) tuvo algunos problemas en la marca, pero probó en el ataque, y Claudio Morel Rodríguez (4) mostró algunas fisuras, sobre todo en el gol del empate transitorio, en donde cometió dos errores.