Protesta frente a las fiscalías por la muerte de Cintia Saavedra

La de ayer fue una mañana diferente para la familia de Cintia Saavedra, la joven que era intensamente buscada por todos los rincones de la Ciudad y apareció en la morgue policial como NN.

A medida que transcurren los días y, no se obtienen respuestas para tantos interrogantes, la angustia y la desesperación se multiplican. Por eso los allegados a la víctima salieron decididos a efectuar una fuerte protesta frente al edificio de las fiscalías platenses, donde quemaron varios neumáticos y exigieron justicia.

"Es una vergüenza, pero mi hija sigue en la morgue y no nos autorizan a realizar una nueva autopsia. Creo que tenemos derecho a saber qué le pasó a Cintia, porque eso del accidente ferroviario, no se lo cree nadie", destacó Lucía Orieta, madre de la joven.

"Sabemos que hay testigos, pero tienen miedo. Están amenazados y hasta ahora no logramos convencerlos para que se presenten a declarar. A mi hija le pasó algo muy feo y ella no se lo merecía. Por eso vamos a seguir luchando hasta que se conozca la verdad", agregó.

Orieta aclaró que "pedí entrevistarme con el Gobernador Solá, pero me derivaron a la oficina de asistencia a la víctima. Nadie nos apoya, pero no importa. Tenemos la suficiente fuerza para que esto se esclarezca".

Según la hipótesis que maneja la familia, la joven pudo haber sido atacada por varios hombres y, en esas circunstancias, sufrió el peor final.

Cintia Saavedra era madre de una nena de 3 años y vivía con su pareja, en Tolosa. Era estudiante de abogacía en la universidad local. La última vez que la vieron, la chica estuvo en la vivienda que compartía con su pareja, David Hubicki. Según contó la familia de la chica, el hombre reconoció que Cintia pasó la noche del 21 de octubre con él y que se retiró del lugar tras una discusión.