Patricia Sosa, en una etapa de su carrera

A pocos meses de editar el disco "Entre lija y terciopelo", la cantante Patricia Sosa reveló su satisfacción por la repercusión que está teniendo en el público un trabajo que la muestra, según sus propias palabras, "adulta y consolidada".

"La gente está enloquecida. A mí me gusta cantar los nuevos temas, realmente estoy muy contenta. Este disco tiene la mirada de una mujer adulta y consolidada. A veces miro algunas letras que hice antes y están bien porque me identificaban en una época, pero ahora ya no. Actualmente trato de centrarme en mi eje, estoy bastante más iluminada y serena, con los pies sobre la tierra. Trato de ser muy honesta con todo lo que escribo", sostuvo.

La intérprete de "Endúlzame los oídos" expresó además su orgullo por haber grabado el tema "Un amor más grande que el amor" junto a Ricardo Montaner, un dueto que será cortina musical de la segunda temporada de "Mujeres de nadie".

"Ricardo es muy generoso, grabar con él estuvo buenísimo. Y ahora el tema es la nueva cortina del segundo año de `Mujeres de nadie', que arranca en pocas semanas. Con un tema sonando en la televisión se te abre la posibilidad de llegar a la gente desde otro medio, es la chance de que otros corazones se contacten con tu arte", sostuvo.

Por otro lado, Sosa indicó que le gusta que en sus grabaciones "se note que pasó el tiempo", desde sus inicios con el grupo La Torre hasta la actualidad.

"Me gusta que los temas se pasen por las radios y no pregunten quién es la pibita que canta. Anhelo que digan: `¡Qué voz madura'. En lo estético siempre me cuidé y es algo genético, me siento muy joven más allá de que estoy hace tres décadas de gira", afirmó.

Por último, la artista -que presentará "Entre lija y terciopelo" en Abril en el teatro Gran Rex- se refirió a su rol de jurado en el certamen "Cantando por un sueño", en el que tanto ella como su pareja, el productor Oscar Mediavilla, fueron catalogados como los "malos" del concurso.

"Oscar y yo hicimos lo que pudimos, sinceramente. A veces contamos hasta diez, varias veces nos codeábamos y no queríamos ofender. Hay gente que está con la autoestima baja y no puede ser, hay que tenerla alta y ponerle ganas, tratando de dar datos para elevar. Si los agarran bien, algunos lo hacen. Otros no, porque sólo les interesa la cámara, ya son famosos y hay que ponerse en el lugar de ellos", argumentó.